Chistes de 1 000

Estos son los 5 chistes de 1 000 y más graciosos bromas sobre 1 000 que matan de risa. Lea chistes acerca 1 000 que sean buenos chistes para niños y amigos en español.


Chistes de 1 000 para niños y niñas cortos y graciosos

¿Cuál es un buen chiste sobre 1 000 para hacer reír a la gente? Mira esta lista de historias divertidas que seguramente harán sonreír a todos.

  1. En un elevador se suben tres personas; una mujer super inteligente, la mujer maravilla y una ama de casa. Resulta que dentro del elevador encuentran un maletín con más de 1,000,000 de dólares.
    ¿Quién se los lleva?
    La ama de casa, porque las otras dos no existen.
  2. Un tipo que estaba en un restaurant percatándose que otro era muy conocido le pregunta:
    Oiga, a usted todo el mundo lo conoce.
    A lo que Benny contesta:
    Sí, todo el mundo me conoce.
    Entonces el tipo le dice:
    Le apuesto 100,000 dólares a que no lo conoce José Luis Rodríguez "El puma".
    Entonces van a verlo y Benny saluda al Puma:
    Hola Puma, ¿Cómo estás?
    Hola Benny, contesta el Puma.
    El señor anonadado le pide hacer otra apuesta de 150,000 dólares.
    A que no lo conoce el presidente de USA.
    Como no lo voy a conocer, si nos llevamos de a cuartos.
    Entonces, viajan a la Casa Blanca llegan y los guardias al ver venir a Benny lo saludan:
    ¡Hello, hi!
    A lo que Benny pregunta:
    ¿Se encuentra el presidente?
    Yes come in.
    El presidente lo ve llegar y lo saluda:
    ¡Hello Benny!
    ¡Hello George!
    El pobre tipo casi se desmaya de la impresión. Y así van visitando a toda la gente más importante del mundo y todos conocen a Benny. El tipo decide hacer una última apuesta de 1,000,000 dólares.
    ¡A que no lo conoce el Papa!
    Y viajan al Vaticano, al llegar al Vaticano entran, y el Papa está en el balcón principal, entonces Benny le dice al tipo:
    Espérame tú aquí, tú no puedes subir.
    El tipo se queda y ve como Benny va saludar al Papa, de repente Benny voltea a ver al tipo para presentarle al Papa desde arriba y su sorpresa es que ve que el tipo se desmaya, Benny baja apurado para ver qué es lo que pasó, entonces Benny lo empieza a levantar y le pregunta que por qué se desmayó, el tipo le contesta:
    Es que mientras tú saludabas al Papa, dos tipos que estaban a mi lado voltearon hacia el balcón y uno le dijo al otro:
    Oye, ¿Quién es ese que está con Benny?
  3. Esta era una vez que la maestra le dice a los estudiantes:
    Niños, mañana tendrán prueba de deletreo.
    Al día siguiente...
    Bien niños, vamos a empezar, Luisito tienes que decir la ocupación de tu padre y qué haría si estuviera aquí.
    Mi papá es Panadero P-a-n-a-d-e-r-o y si estuviera aquí le daría un pedazo de pan a cada uno.
    Muy bien, Carlitos, ¿Y tú?
    Mi papá es banquero b-a-n-q-u-e-r-o y si estuviera aquí le daría 100 dólares a cada uno.
    Muy bien, dale José.
    Mi papá es electricista, e-l-c-t-r...
    Está bien José, te dejaremos para el último.
    Dale Pepito, te toca.
    Mi papá es apostador A-p-o-s-t-a-d-o-r y si estuviera aquí apostaría $1,000 a que José no puede deletrear electricista.
  4. Un tipo que estaba en un restaurant percatándose que otro era muy conocido le pregunta:
    Oiga, a usted todo el mundo lo conoce.
    A lo que Benny contesta:
    Sí, todo el mundo me conoce.
    Entonces el tipo le dice:
    Le apuesto 100,000 dólares a que no lo conoce José Luis Rodríguez "El puma".
    Entonces van a verlo y Benny saluda al Puma:
    Hola Puma, ¿Cómo estás?
    Hola Benny, contesta el Puma.
    El señor anonadado le pide hacer otra apuesta de 150,000 dólares.
    A que no lo conoce el presidente de USA.
    Como no lo voy a conocer, si nos llevamos de a cuartos.
    Entonces, viajan a la Casa Blanca llegan y los guardias al ver venir a Benny lo saludan:
    ¡Hello, hi!
    A lo que Benny pregunta:
    ¿Se encuentra el presidente?
    Yes come in.
    El presidente lo ve llegar y lo saluda:
    ¡Hello Benny!
    ¡Hello George!
    El pobre tipo casi se desmaya de la impresión. Y así van visitando a toda la gente más importante del mundo y todos conocen a Benny. El tipo decide hacer una última apuesta de 1,000,000 dólares.
    ¡A que no lo conoce el Papa!
    Y viajan al Vaticano, al llegar al Vaticano entran, y el Papa está en el balcón principal, entonces Benny le dice al tipo:
    Espérame tú aquí, tú no puedes subir.
    El tipo se queda y ve como Benny va saludar al Papa, de repente Benny voltea a ver al tipo para presentarle al Papa desde arriba y su sorpresa es que ve que el tipo se desmaya, Benny baja apurado para ver qué es lo que pasó, entonces Benny lo empieza a levantar y le pregunta que por qué se desmayó, el tipo le contesta:
    Es que mientras tú saludabas al Papa, dos tipos que estaban a mi lado voltearon hacia el balcón y uno le dijo al otro:
    Oye, ¿Quién es ese que está con Benny?
  5. Había un hombre que trabajaba en al oficina de correos, cuyo trabajo era procesar las cartas que traían la dirección ilegible.
    Un día, llego a sus manos una carta que traía escritura temblorosa y que iba dirigida a Dios, pero no tenia dirección alguna.
    Como esa carta no iba a ir a ningún lado, decidió abrirla para ver de qué se trataba:
    "Querido Dios: Soy una viuda de 84 años, que vive de una pequeña pensión. Ayer, alguien robó mi bolsa que tenía 1,000 pesos, era lo que me quedaba de la quincena y ahora voy a tener que esperar hasta mi próximo cheque, no sé que hacer.
    El próximo domingo es Navidad y había invitado a dos amigas mías a cenar, pero sin dinero, no tendré qué ofrecerles, no tengo ni comida para mí, no tengo familia y eres todo lo que tengo, mi única esperanza.
    ¿Me podrías ayudar? Por Favor.
    Sinceramente Maria.
    Fue tal el impacto que la carta causó al empleado postal, que este decidió mostrarla a sus compañeros de trabajo, todos quedaron acongojados y hicieron una colecta... comenzaron a buscar en sus bolsillos y carteras, al final de la tarde habían hecho un cooperación de 880,00 pesos, los cuales guardaron en un sobre y se lo mandaron a la dirección del remitente de Maria .
    Esa tarde, todos los empleados que cooperaron, sintieron un rico calorcito en el ambiente y una sensación de satisfacción que tal vez no experimentaban hace mucho tiempo, al saber lo que habían hecho por Maria y sus amigas.
    Llegó la Navidad y se fue. Algunos días después de la Navidad, llegó a la oficina de correos otra carta de María, la cual reconocieron inmediatamente por la escritura y porque iba dirigida a Dios. La abrieron y todos con curiosidad escucharon lo que decía:
    "Querido Dios: Con lagrimas en mis ojos y con todo el agradecimiento de mi corazón te escribo estas líneas para decirte que hemos pasado, mis amigas y yo, una de las mejores Navidades de la vida, y todo por tu maravilloso regalo, debes saber que siempre hemos sido fieles a tu mandato y hemos seguido todos tus mandamientos, tal vez esa sea la razón de tu benevolencia con nosotras y en especial conmigo.
    Gracias Dios, por cierto, faltaban 120 pesos, nada importante, seguramente se los afanaron esos hdp del correo."