Chistes de Botiquin

Estos son los 3 chistes de botiquin y más graciosos bromas sobre botiquin que matan de risa. Lea chistes acerca botiquin que sean buenos chistes para niños y amigos en español.


Chistes de botiquin para niños y niñas cortos y graciosos

¿Cuál es un buen chiste sobre botiquin para hacer reír a la gente? Mira esta lista de historias divertidas que seguramente harán sonreír a todos.

  1. Está la maestra en la escuela y le solicita a los alumnos llevar artículos para su botiquín de primeros auxilios. Al día siguiente llega Juanito con alcohol, y la maestra le dice:
    Muy bien, Juanito, ¿Y para qué sirve el alcohol?
    Juanito responde:
    Pues para desinfectar heridas y hacer asepsia antes de las inyecciones.
    La maestra:
    Muy bien.
    Entonces, llega Lupita con un tanto de algodón, y la maestra pegunta:
    Lupita, ¿Para qué sirve el algodón?
    Y Lupita responde:
    Maestra, en esta presentación se hacen motitas y con el alcohol se desinfectan las heridas.
    Muy bien, dice la maestra.
    En eso llega Pepito con un tanque de oxigeno, y la maestra le pregunta:
    Pepito, ¿Un tanque de oxigeno? ¿Y para qué sirve?
    Pepito responde:
    La verdad, no sé pero cuando se lo quité a mi abuelita me dijo:
    !No te lo llevessssssss!
  2. Un viejito quería hacer el amor, y se va a buscar a una p**... para complacerse.
    En el momento importante al viejo no se le paraba, así que en toda su desesperación le dice a la p**... que lo espere un momento y se va al baño del motel. En la oscuridad busca en el botiquín algo que le pueda solucionar el problema y encuentra una pequeña pomada. Se la aplica en la cuestión y siente que le devuelve el vigor juvenil.
    El viejo vuelve a la cama y le hace el amor a la p**..., quien a su vez queda sorprendida con el vigor del viejo. Una vez terminado todo, al viejo le entra curiosidad de saber que era lo que se había echado. Se levanta, va al baño, enciende la luz y busca la pomadita mágica que decía:
    "POMADA PARA CALLOS: ¡endurece, seca, se pudre y se cae!"
  3. La abuela y el abuelo fueron de visita a casa de su hijo, nuera y nietos y se quedaron a pasar la noche.
    Cuando el abuelo se encontró con un frasco de Viagra
    en el botiquín de su hijo, le preguntó a éste
    si podía usar una de las pildoritas.
    El hijo le dijo:
    - Yo creo que no deberías hacerlo, Papá;
    son muy fuertes. Y son muy caras.
    - ¿Cuánto cuestan? Preguntó el abuelo.
    - 20 Eur. por pastilla - le contestó el hijo.
    - No importa, dijo el abuelo,
    - Insisto en que quiero probar.Al irme por la mañana, te dejaré el dinero debajo de la almohada.
    Al día siguiente, cerca del mediodía, el hijo encontró 220 Eur. bajo la almohada.
    Llamó al abuelo y le dijo,
    - Te dije que cada píldora costaba 20 Eur. no 220.
    - Te entendí, respondió el abuelo. ¡Los 200 Eur. los puso la abuela!