Chistes de Centavos

Estos son los 27 chistes de centavos y más graciosos bromas sobre centavos que matan de risa. Lea chistes acerca centavos que sean buenos chistes para niños y amigos en español.

Tabla de contenidos


Los Mejores Chistes de Centavos

Estos son nuestros mejores frases chistosas de centavos. Diviértete con un buen bromas de centavos en español con sencillo humor de centavos y fotos para reir.

  1. Era un hombre tan enano, pero tan enano, que cuando se sentó en una moneda de 25 centavos le sobraban 24 centavos.



Chistes de centavos muy buenos y graciosos

Los chistes de centavos para niños y para amigas muy buenos y graciosos siempre son un éxito en las fiestas. La risa está garantizada cuando se comparten estas centavos bromas divertidas.

Va un hombre a una parada de colectivos.


Viene un colectivo, frena,suben personas y bajan otras y el hombre le pregunta:
:- ¿Cuanto sale el colectivo?:|
Y el colectivero le responde:
:- 50 centavos.
:- ¡¡¡Entonces bajense todos que lo compro!!!
:p

Dicen que iba un tipo caminando por la calle, y se le acercan dos malhechores y le dicen:
¡Dame toda la plata!
El tipo les da 20 centavos.
Este tonto tiene apenas 20 centavos, mejor vamos, dice uno de los delincuentes.
A lo que el tipo dice:
¡Ah! ¿Y los $40 que tengo en la media?

¿Cómo se dice abuelo en chino?
- Respuesta: cachisemuele
¿Cómo se dice pobre en chino?
- Respuesta: chin cinco centavo.
¿Cómo se dice papel hingenico en chino?
- Respuesta: lilola o kita kakita.
¿Cómo se dice señora en japones?
- Respuesta: Tá-UTSA.
¿Y Señorita?
- Respuesta: No Tá-UTSA.
.

Una joven va a la bodega a comprar huevos y le pregunta al bodeguero:
¿Qué precio tiene medio kilo de huevos?
Y le responde el bodeguero:
Dos pesos.
¿Y los huevos quebrados?
Cincuenta centavos.
Por favor, quiébreme dos kilos.

Un codicioso estaba hablando con Dios y le pregunta:
- Dios, ¿cuánto es para tí un segundo?.


Y Dios le contesta:
- Mil años.
- ¿Y un centavo?.
- Mil euros.
- Entonces, ¿podrías regalarme un céntimo?.
- Está bien, dame un segundo...

Un codicioso estaba hablando con Dios y le pregunta:
- Dios, ¿Cuánto es para ti mil años?
Y Dios le contesta:
- Un segundo.
- ¿Y un millón de pesos?.
Y Dios le contesta:
- Un centavo.
Entonces el codicioso le dice: ¿Me das un un centavo?.
A lo que Dios le contesta:
- Espérate un segundo.

Un hombre rezando, le pregunta a Dios:
-Señor Dios, tu que lo sabes todo, ¿Qué es para ti un millón de años?
-Pues menos de un segundo...
-¿Y un millón de dolares?
-Menos de un centavo...
-¿Ah si? ¿Me das entonces un centavo?
-Claro que si amigo, ¡en un segudo!

Ésta es una mujer que sabiendo las tacañerías de su marido le dice casi suplicándole:
Mi amor, ¿cuándo me vas a comprar un vestido de noche?
El esposo con la intención mínima de gastar ni un centavo, le dice:
¡Cuántas veces te voy a decir que las tiendas no están abiertas de noche!

Se encuentran dos amigos en un bar y uno le dice al otro:
Vamos a hacer un negocio, ¿Cuánto me das si te vendo a mi suegra?
El otro responde:
Por tu suegra, ni un centavo.
El otro responde:
Okay, trato hecho.

Entra un borracho al un bar y le pide al cantinero un trago de wisky, del mejor, el cantinero le da el trago de wisky. El borracho se bebe el wisky y se va a la pista del bar, y se pone a practicar boxeo. Después de un rato, el borracho vuelve a la cantina y pide otro wisky, y el cantinero le da el wisky, el borracho no le paga el wisky, y vuelve a la pista y se pone a practicar de nuevo. Todo el mundo se queda mirando al borracho y el cantinero dice:
Pero bueno, este hombre está loco.
El cantinero se hace pasar por loco y va donde está el borracho, y le pregunta:
Señor, ¿cuándo comienza la pelea?
Y el borracho le contesta:
Cuando usted se dé cuenta que yo no tengo ni un centavo en mi cartera.

Querido Ex-Esposo
Te estoy escribiendo esta carta para manifestarte que he decidido dejarte, para bien de los dos. He sido una buena mujer para tí estos siete años, y sin embargo no puedo mostrar nada bueno que me haya tocado a mí.
Estas dos últimas semanas han sido un i**...: Tu jefe llamó para decirme que habías renunciado al trabajo hoy, y eso fue lo máximo que pude soportar.
La semana pasada, viniste a casa y no me mencionaste nada acerca de mi corte de cabello y el arreglo de mis uñas; cociné tu comida favorita y hasta usé un nuevo negligé. Llegaste a casa y comiste en dos minutos, y te fuiste directo a dormir después de ver el juego de pelota. No me dices más que me amas, no me tocas ni nada. O me estás engañando con otra o no me amas más. Cualquiera que sea el caso, me quiero ir, te abandono.
P.D. No trates de buscarme. Tu hermano y yo nos mudamos a
Barquisimeto juntos. Que tengas una buena vida.
Tu ex-esposa.
------respuesta del marido---------------------------------
Querida Ex-esposa:
Nada me hubiera causado mayor alegría que recibir tu carta. Es verdad que tú y yo hemos estado casados 7 años, aunque eso no significa que hayas sido una buena mujer. Todo lo contrario. Yo miro mucho los juegos para tratar de ahogar el aburrimiento que me causan tus constantes quejas y malas actitudes.
Qué malo que no funcionó nuestro matrimonio, porque yo si te amaba. Yo si noté que te habías cortado tu cabello, y la primera cosa que me vino a la mente fue: ¡¡¡Luce como un hombre!!! Pero mi madre me enseñó que si no puedo decir algo bueno de alguien, es mejor no decir nada. Cocinaste mi comida favorita, debes haberme confundido con mi hermano, porque yo dejé de comer cerdo hace casi 7 años. Me fui a dormir cuando te pusiste ese negligé, porque la etiqueta con el precio todavía estaba pegada a la prenda. Recé pidiendo que fuera coincidencia que mi hermano me pidió prestados $200.000 esa misma mañana y la etiqueta de tu negligé marcaba $199.000, Después de todo esto, como todavía te amaba, sentí que todavía podíamos resolver lo nuestro. Así, que cuando descubrí que me había ganado el loto de 6750 millones de pesos, renuncié a mi trabajo para tener todo el tiempo para tí, y además compré dos boletos para Europa. Pero cuando llegué a casa, tú te habías marchado. Todo ocurre por una buena razón, creo.
Espero que tengas la vida que siempre deseaste. Mi abogado dice que por la carta que me dejaste, no recibirás ni un centavo de mí. Así que cuídate mucho.

Firmado, Rico y Libre!!!!
Tu Ex

La radio del campesino

Llega un campesino a un bar con una radio bajo el brazo ofreciéndola en venta. En una mesa cercana hay varios hombres que al verlo tan humilde se proponen quitarle la radio sin pagarle un centavo. Uno de los hombres le comenta a los otros:
- Os aseguro que con unas cervezas encima, ese campesino terminará rebajando el coste de la radio hasta casi nada.
Por lo que lo invitan a sentarse con ellos. Entonces, preguntan al campesino:
- ¿En cuánto nos vendes tu radio?
- 30 euros, responde de manera ingenua.
- Ok, vamos a tomarnos unas cervezas y luego hablamos.
Al cabo de un rato ya se han tomado varias cervezas cada uno y le vuelve a preguntar:
- Y entonces, ¿En cuánto la vendes?
- Bueno, dame 10 euros - responde el campesino.
- Me parece mejor. ¡Vamos, te invito a otras cervezas!
Luego de un buen rato le pregunta nuevamente al campesino,
- Y ahora, ¿En cuánto me la vendes?
- Dame 5 euros para poder irme a mi casa.
El hombre, viendo la posibilidad de quedarse con la radio, decide continuar con la ronda de cervezas y luego de otro buen rato insiste:
- Y ahora campesino, ¿En cuánto me lo vendes?
A lo que el campesino responde:
- Te voy a decir la verdad, yo quería vender la radio para beber cerveza pero, como ya estoy borracho he decidido no venderla e irme ya a mi casa.

Un hombre entra, acompañado de una preciosa chica, en una tienda super exclusiva.

El hombre (dirijiéndose al vendedor) dice:
- Por favor, muéstrele a la señorita el más fino abrigo de visón de la tienda.
El vendedor regresa con un maravilloso abrigo e imediatamente la joven se lo prueba. ¡Le queda divino!. El vendedor le susurra discretamente al caballero que el abrigo cuesta $ 65,000.
- ¡No importa el precio¡ -y añade, subiendo el tono- le escribiré un cheque ahora mismo.
- Muy bien -contesta el vendedor- hoy es viernes. Así que puede venir a recogerlo el lunes cuando el cheque haya sido aceptado por el banco.
El hombre sale muy orondo con su chica. Cuando llega el lunes, el tipo regresa a la tienda y se encuentra al vendedor (muy ofendido) quien le dice:
- ¿Cómo se atreve Ud. a venir sabiendo que no tiene un centavo en la chequera?
A lo que el hombre responde:
- Yo sólo vine para agradecerle el más placentero fin de semana de toda mi vida.

Estaba un ventrílocuo que era muy alcohólico afuera de una cantina sin un centavo en la bolsa y pensando en como sacar dinero para emborracharse, y en eso ve a un pobre perro todo roñoso y se le viene una idea, entra a la cantina y se sienta él en una silla y al perro en otra y pide dos tequilas, el cantinero le sirve los dos tequilas y el ventrílocuo le da un tequila al perro y le dice:
¡Salud!
Y el perro le contesta:
No, gracias, tómatela tú, yo no tengo ganas de tomar.
El cantinero asombradísimo se le queda mirando, entonces el ventrílocuo de pide otros dos tequilas al cantinero y hace lo mismo a lo que el perro contesta:
No, gracias, ya te dije que no quiero, tómatela tú.
Y sin aguantar su curiosidad el cantinero le pregunta:
Oiga señor, ¿Su perro habla?
Y el ventrílocuo le responde:
Pero por supuesto que habla y aparte es retomador le encanta el tequila sólo que hoy esta un poco enfermo y no quiere tomar, y el cantinero le dice:
Se lo cambio por dos botellas de tequila.
Y el ventrílocuo se queda pensando y el perro le dice:
No seas gacho no me vayas a cambiar. Y el ventrílocuo le contesta:
Pero es que son dos botellas y pues, tus sabes que me gusta mucho el tequila, y el perro le dice:
No seas así no me vayas a cambiar, y entonces el ventrílocuo cierra el trato con el cantinero y en eso el perro le dice:
Vas a ver, nunca en mi vida vuelvo a hablar.

Un tipo recibe una pizza en su casa, y le pregunta al repartidor:
-¿Cuál es la propina acostumbrada?
-Pues… suele ser de 1 dólar, pero mi jefe dice que si logro que usted suelte 10 centavos, ya sería un milagro.
-Ah sí? –dice enfadado el cliente- Pues toma 5 dólares!
-Gracias señor! Lo ahorraré para mis estudios
-Y si se puede saber, ¿Qué estudias?
-Sicología aplicada, señor

Un hombre estaba parado en una esquina y se le acercan dos individuos que lo intiman a que les dé todo el dinero que poseía, sino le darían una fuerte y feroz paliza, a lo que el hombre se niega y recibe la golpiza, logran sustraerle solo $0.50 centavos y entonces al mirarlo casi moribundo le recriminan:
¡Pero vos sos un burro, por tan poco te haces golpear!
Entonces el hombre les responde:
Sí, ¿Y los cien que tengo en la media?

Llega un campesino a un bar con una radio bajo el brazo ofreciéndola en venta.

En una mesa cercana hay varios citadinos quienes al verlo humilde se proponen quitarle la radio sin pagarle un centavo. Uno de los citadinos le comenta a los otros:
Les aseguro que con unas cervezas encima, ese campesino terminará rebajando el costo de la radio hasta casi nada.
Por lo que lo invitan a sentarse con ellos. Entonces, pregunta el citadino:
¿En cuánto nos vendes tu radio?
En 30 dólares, responde de manera ingenua.
Okay, dice el citadino, vamos a tomarnos unas cervezas y luego hablamos.
Al cabo de un rato ya se han tomado varias cervezas cada uno y el citadino vuelve a preguntar:
Y entonces, ¿En cuánto la vendes?
Bueno, deme 10 dólares, responde el campesino.
Me parece mejor, dice el citadino.
¡Vamos, te invito a otras cervezas!
Luego de un buen rato le pregunta nuevamente al campesino,
Y ahora, ¿En cuánto me la vendes?
Deme 5 dólares para poder irme a mi casa.
El citadino, viendo la posibilidad de quedarse con la radio, decide continuar con la ronda de cervezas y luego de otro buen rato insiste:
Y ahora campesino, ¿En cuánto me lo vendes?
A lo que el campesino responde:
Le voy a decir la verdad, yo quería vender la radio para beber cerveza pero, como ya estoy borracho he decidido no venderla e irme ya a mi casa.

Querido Ex-Esposo
Te estoy escribiendo esta carta para manifestarte que he decidido dejarte, para bien de los dos. He sido una buena mujer para tí estos siete años, y sin embargo no puedo mostrar nada bueno que me haya tocado a mí.
Estas dos últimas semanas han sido un i**...: Tu jefe llamó para decirme que habías renunciado al trabajo hoy, y eso fue lo máximo que pude soportar.
La semana pasada, viniste a casa y no me mencionaste nada acerca de mi corte de cabello y el arreglo de mis uñas; cociné tu comida favorita y hasta usé un nuevo negligé. Llegaste a casa y comiste en dos minutos, y te fuiste directo a dormir después de ver el juego de pelota. No me dices más que me amas, no me tocas ni nada. O me estás engañando con otra o no me amas más. Cualquiera que sea el caso, me quiero ir, te abandono.
P.D. No trates de buscarme. Tu hermano y yo nos mudamos a
Barquisimeto juntos. Que tengas una buena vida.
Tu ex-esposa.
- -----respuesta del marido---------------------------------
Querida Ex-esposa:
Nada me hubiera causado mayor alegría que recibir tu carta. Es verdad que tú y yo hemos estado casados 7 años, aunque eso no significa que hayas sido una buena mujer. Todo lo contrario. Yo miro mucho los juegos para tratar de ahogar el aburrimiento que me causan tus constantes quejas y malas actitudes.
Qué malo que no funcionó nuestro matrimonio, porque yo si te amaba. Yo si noté que te habías cortado tu cabello, y la primera cosa que me vino a la mente fue: ¡¡¡Luce como un hombre!!! Pero mi madre me enseñó que si no puedo decir algo bueno de alguien, es mejor no decir nada. Cocinaste mi comida favorita, debes haberme confundido con mi hermano, porque yo dejé de comer cerdo hace casi 7 años. Me fui a dormir cuando te pusiste ese negligé, porque la etiqueta con el precio todavía estaba pegada a la prenda. Recé pidiendo que fuera coincidencia que mi hermano me pidió prestados $200.000 esa misma mañana y la etiqueta de tu negligé marcaba $199.000, Después de todo esto, como todavía te amaba, sentí que todavía podíamos resolver lo nuestro. Así, que cuando descubrí que me había ganado el loto de 6750 millones de pesos, renuncié a mi trabajo para tener todo el tiempo para tí, y además compré dos boletos para Europa. Pero cuando llegué a casa, tú te habías marchado. Todo ocurre por una buena razón, creo.
Espero que tengas la vida que siempre deseaste. Mi abogado dice que por la carta que me dejaste, no recibirás ni un centavo de mí. Así que cuídate mucho.
Firmado, Rico y Libre!
Tu Ex

Un abogado está parado ante San Pedro, quien lee un listado de sus pecados:
1- Defender a una compañía que produjo la destrucción de una ciudad completa por contaminación ambiental habiendo pruebas contundentes de la culpabilidad de la misma.
2- Defender a un peligroso asesino, obviamente culpable, por ser un buen cliente y ofrecer una paga sustanciosa.
3- Recargar las cuentas de los clientes, etc, etc, etc...
El abogado, en pos de defenderse, le dice a San Pedro:
- ¡Eh, está bien! ¡Acepto los cargos! ¿Pero qué hay de las obras de bien que he hecho en mi vida???
San Pedro mira en otro listado y dice:
- Sí, es cierto, veo que en una oportunidad le dio 10 centavos de más a su lustrabotas... es eso cierto?
- Cierto!
- Y aquí ¡veo que en otra ocasión le dio 5 centavos a un mendigo... es eso cierto?
- Si señor!
Entonces San Pedro mira al ángel que tiene al lado y le dice:
- Está bien! Consíganle 15 centavos y digan, que se vaya al i**...!!!!

Era una vez un tipo que entra a una barra y dice:
¡Cantinero sírvame un trago!
El cantinero muy contento le dice;
-aquí tiene caballero..
El hombre le dice sírvame otro..
-y el cantinero muy contento otra vez le dice aquí tiene caballero..
Y así sucesivamente..
En una el cantinero le dice usted no cree que lo que está haciendo es malo..
El hombre borracho le dice: ¿el qué? ¿Qué esté bebiendo en esta barra? o
¿Qué esté bebiendo sin uno solo centavo encima!!

Entra un borracho a una cantina y le dice al mesero:
Sírvame 7 tragos de whisky.


El mesero le pregunta:
¿Qué le pasa?
Y el borracho le dice:
¡Que no mas sirva, y no pregunte!
Y el borracho empieza a tomar, cuando va en la sexta copa el mesero le pregunta de nuevo:
¿Qué le pasa?
Y el borracho le responde:
Si tú supieras lo que me va a pasar con sólo 75 centavos en mi bolsillo.

Un tipo se encuentra una lámpara, la limpia y de ella sale un genio diciéndole que está muy agradecido por haberlo liberado y que por consiguiente le concederá un deseo. El tipo le pregunta:
- ¿Lo que yo quiera?
El genio le contesta que sí y le dice:
- Lo que para mí es un segundo, para tí es una eternidad y lo que para mí es un centavo para tí es un billón de dólares.
Entonces el tipo dice:
- Dame un centavo.
Y el genio contesta:
- Si como no, esperate un segundo.

Había una vez un ingeniero que tenia un don excepcional para arreglar cualquier aparato mecánico.

Después de trabajar lealmente para su empresa durante mas de treinta años, se jubilo felizmente.
Algunos años mas tarde, la empresa contacto con el por un problema al parecer imposible de resolver que tenían en una maquina valorada en millones de dólares. Habían intentado todo para volver a poner en marchala máquina pero sin resultado.
Desesperados, llamaron al ingeniero jubilado que en el pasado había resuelto tantos problemas.
El ingeniero acepto el reto encantado. Se paso el día estudiando la inmensa maquina. Al final del día, marco una pequeña 'x' con tiza sobre un cierto componente de la maquina y dijo:
- "Aquí es donde esta el problema".
El componente se cambio y la maquina volvió a trabajar perfectamente.
La empresa recibió del ingeniero una factura de 50.000 dólares por sus servicios. Ante la petición de la empresa de una descripción detallada de la factura, el ingeniero respondió escuetamente:
- Por la marca de tiza: 1 dólar
- Por saber donde ponerla: 49.999 dólares
Se le pago hasta el ultimo centavo y el ingeniero volvió a su apacible retiro.

Cuál es la propina acostumbrada, le pregunta un tipo al repartidor de pizzas, Pepito, estudiante universitario que hace este trabajo para ayudarse a pagar los estudios.
Pues, esta es mi primera entrega, pero el tipo que me dio el trabajo dice que si logro que usted suelte una moneda de 25 centavos, va a ser un milagro.
¿Ah, sí?, gruñe el cliente, pues, en ese caso, ¡Toma $5!
¡Gracias, señor!, exclama Pepito, pondré el dinero en el fondo para mis estudios.
Y, a propósito, ¿Qué carrera estás estudiando?
Sicología aplicada, contesta el chico.

Este es un señor que le gusta pedir, y llega donde un amigo y le dice:
Juan, ¿Cómo estás?, oye pasaba por aquí para que me prestes un dólar.
No tengo dinero, no te puedo prestar.
Bueno, entonces préstame 75 centavos.
Ya te dije que no tengo, no te voy a dar nada.
Bueno, dame 50 centavos y ya.
Que no tengo, no me pidas más.
Está bien, dame 25 centavos y lo dejamos así.
Ya te dije que no, no me molestes, que no tengo plata.
Entonces le mira el bolsillo a Juan, y le pregunta:
¿Qué tienes ahí?
Y Juan le contesta:
Son gotas para los ojos.
Echame una gotita, pues.

Llega una niña a su casa y le dice a su mama:
¡Mamá, mamá, un niño me dio 50 centavos por bajarle su globo de un árbol!
y la mamá le dice:
Niña tonta, no ves que lo quería era mirarte los calzones.
El segundo día pasó lo mismo.
Al tercer día llega la niña a su mamá y le dice lo mismo. Y su mamá le dice:
Ay, pero que burra, no ves que lo que quería era verte los calzones.
y la niña le dice:
¡No, ahora no me los vio porque me los quite antes de subir!

Los chistes son una forma popular de entretenimiento que típicamente consta de una anécdota o historia cómica con un final sorpresivo y gracioso. Existen muchos géneros de chistes, como los chistes de niños, los chistes de adultos, entre otros. El propósito principal de los chistes es provocar risa, normalmente atravesando conceptos o situaciones comunes en la vida de una manera humorística y a menudo irónica. La habilidad de contar chistes y hacer reír a las personas es una gran forma de romper el hielo y de conectar con los demás.

chistes de centavos

Contar chistes de centavos es una parte importantísima de cualquier conversación o reunión social. Los chistes, llenos de humor y diversión, tienen la capacidad de liberar tensiones y crear un ambiente relajado y alegre. Pueden contarse en cualquier situación, siempre y cuando sea apropiado y no ofenda a nadie. Contar chistes puede ser especialmente efectivo para romper el hielo al inicio de un evento social, hacer reír a los demás en medio de una conversación o simplemente alegrar el día de alguien que puede necesitarlo. Sin embargo, es esencial recordar que el sentido del humor puede variar de una persona a otra, y lo que para uno puede ser gracioso, para otro puede no serlo.