Chistes de Cepillo Dientes

Estos son los 10 chistes de cepillo dientes y más graciosos bromas sobre cepillo dientes que matan de risa. Lea chistes acerca cepillo dientes que sean buenos chistes para niños y amigos en español.


Chistes de cepillo dientes para niños y niñas cortos y graciosos

¿Cuál es un buen chiste sobre cepillo dientes para hacer reír a la gente? Mira esta lista de historias divertidas que seguramente harán sonreír a todos.

  1. En la consulta el dentista le comenta a la paciente:
    - Bueno, pues ya le he implantado el diente postizo
    - ¿Me lo puedo cepillar, doctor?
    - Hecho, salgo a las 8...
  2. Este es un cepillo de dientes que le dice a un papel higiénico:
    Creo que tengo el peor trabajo del mundo.
    Y el papel higiénico le contesta:
    ¡Dímelo a mí!
  3. estos son un papel higienico y un cepillo de dientes separados y que no se conocian i dice en voz alta el cepillo de dientes:Habeces creo que tengo el peor trabajo del mundo i el papel higienico le oye y:piensa no lo creas
  4. -Sabes ¿por qué los gallegos se ahorcan antes de cepillarse los dientes cada mañana?
    -Porque cuando van a echar pasta de dientes ven que pone Colgate.
  5. El peor trabajo Se encuentran el cepillo de dientes y el rollo de papel higiénico comentando sus cosas.
    El cepillo de dientes quejoso dice:
    - A veces pienso que tengo el peor trabajo del mundo.
    A lo que el rollo de papel higiénico contesta:
    - Siiiii….seguro!
  6. Un cepillo de dientes dice: Tío a veces creo que tengo el peor trabajo del mundo-Le es cucha el papél higiénico, y dice: Si... "seguro"
  7. ¿En qué se parece un hombre a un cepillo de dientes?
    - En que sin pasta no vale nada.
  8. Una vez en una cárcel un preso le dijo a un gendarme:
    Oiga mi gendarme, anteayer dejé mi cepillo de dientes en la cama y me lo robaron. Ayer dejé mi peine en la cama, y otra vez me lo robaron, y hoy resulta que dejo mis calcetas, y también me la robaron, ¿Sabe de lo que sospecho?
    Y el gendarme dice:
    No, ¿De qué?
    Entonces el preso le responde:
    Pues empiezo a sospechar que aquí en la cárcel hay ladrones.
  9. Un día nuestra cortadora de césped (eléctrica) se estropeó...
    Mi mujer me llenaba la paciencia dándome a entender que yo debería arreglarla...
    Por mi parte, siempre acababa teniendo otras cosas mas importantes que hacer tipo: lavar el coche, hacer un informe, en fin..., lo que para mi parecía más importante....
    Un día ella pensó un modo de convencerme, muy sutil.
    Cuando llegué a casa, me la encontré agachada en el césped, ocupadísima recortándolo con su tijerita de costura...
    Eso me llegó al alma..., me emocioné...
    Decidí entrar en casa, y volví después de unos minutos, llevándole su cepillo de dientes...
    Se lo entregué y se me ocurrió decirle:
    - "Cuando termines con el césped, podrías también barrer el patio..."
    Después de aquello, no me acuerdo de nada... Estoy en blanco....
    Los médicos dicen que volveré a andar, que perdí sólo la mitad de la visión de un ojo y que cojearé el resto de mi vida
  10. Había una vez un ladron que estaba en la carcel,
    entonces le dice al policía:"anteayer puse mi peine en la cama y me lo robaron, ayer puse mi cepillo de dientes sobre la cama y tambien me lo robaron, y hoy puse mis zapatos sobre la cama y tambien me lo robaron"
    Entonces dice el policia:"y eso qué"
    entonces dijo el ladron: esque, empiezo a sospechar que en la carcel hay ladrones"



chistes de cepillo dientes

Contar chistes de cepillo dientes es una parte importantísima de cualquier conversación o reunión social. Los chistes, llenos de humor y diversión, tienen la capacidad de liberar tensiones y crear un ambiente relajado y alegre. Pueden contarse en cualquier situación, siempre y cuando sea apropiado y no ofenda a nadie. Contar chistes puede ser especialmente efectivo para romper el hielo al inicio de un evento social, hacer reír a los demás en medio de una conversación o simplemente alegrar el día de alguien que puede necesitarlo. Sin embargo, es esencial recordar que el sentido del humor puede variar de una persona a otra, y lo que para uno puede ser gracioso, para otro puede no serlo.