Chistes de Cincuenta

Estos son los 20 chistes de cincuenta y más graciosos bromas sobre cincuenta que matan de risa. Lea chistes acerca cincuenta que sean buenos chistes para niños y amigos en español.


Chistes de cincuenta para niños y niñas cortos y graciosos

¿Cuál es un buen chiste sobre cincuenta para hacer reír a la gente? Mira esta lista de historias divertidas que seguramente harán sonreír a todos.

  1. Éste era un niño que se sube a un bus y le dice al chofer:
    ¿Cuánto cuesta el bus?

    Y éste le responde:
    Cincuenta céntimos.
    Y el niño le dice:
    ¡Bueno, bájense todos que me lo llevo!
  2. Este era un atlante que caminaba por la calle, de repente ve en el piso tres billetes de cincuenta mil bolívares, y el muy tonto regaló dos por tenerlos repetidos.
  3. Doctor, doctor, ¿Cómo se encuentra mi hijo?
    ¿El que se tragó una moneda de cincuenta pesetas?
    Pues sigue sin cambio.
  4. Un padre andaluz le dice a su hijo:
    - Te tengo dicho cuatro millones trescientas cincuenta y cinco mil veces que no seas exagerado
  5. Llega un señor de unos cincuenta o sesenta años a un restaurante acompañado de una rubia despampanante, y el camarero le pregunta:
    - Señor, ¿qué va a tomar?.
    - Un Brugal extraviejo con Perrier.
    - ¿Y la señora?.
    - La señora bien, gracias.
  6. Una joven va a la bodega a comprar huevos y le pregunta al bodeguero:
    ¿Qué precio tiene medio kilo de huevos?
    Y le responde el bodeguero:
    Dos pesos.
    ¿Y los huevos quebrados?
    Cincuenta centavos.
    Por favor, quiébreme dos kilos.
  7. Te estás volviendo un jugador compulsivo.
    ¡Cincuenta mil pesos a que no!
  8. ¿Cuantas plumas tiene un pájaro?
    Cincuenta
  9. La cuenta por favor - Camarero, la cuenta por favor
    - Cincuenta
    - Sin cuenta, que detalle, gracias entonces, adiós!
  10. Las notas El hijo a su padre:
    - Papá, papá, tengo muy buenas noticias para ti. ¿Recuerdas que me prometiste cincuenta euros si aprobaba el curso? Pues alégrate, porque te vas a ahorrar ese dinero.
  11. Ya verás Cuando era joven, me decían: ”Ya verás cuando tengas cincuenta años”. Tengo cincuenta años y no he visto nada. Erik Satie.
  12. Te lo tengo dicho - ¡Te he dicho quince mil trescientas dos mil millones setecientas cincuenta y nueve mil quinientas cuarenta veces que no seas tan exagerado!
  13. Contando manzanas - A ver Jaimito, si tengo cuarenta manzanas en una mano y en la otra tengo cincuenta, ¿qué tengo en total?
    - Las manos muy grandes.
  14. cual es el pais cincuenta?¿?¿:::CHINA
  15. - Camarero, la cuenta.
    - Cincuenta.
    - ¿Sin cuenta?
    - Fabuloso, ¡gracias y que la pase bien!
  16. Dos amigos:
    -Oye ¿cuántos años tiene tu nueva novia?

    -Pues tiene cincuenta...
    - podría ser tu madre!
    -Si, pero es la tuya!
  17. Un señor llega a orillas del rio Jordán y pregunta cuántos dólares le costará cruzarlo, a lo que el botero le dice:
    - Cincuenta dólares.
    - Me parece un poco caro, dice el señor.
    - Comprenda que acá caminó Jesús sobre las aguas.
    - No me sorprende con los precios que cobran.
  18. Cacahuetes sin cáscara Esto es un autobús repleto de viejecitos, que van de viaje a Lourdes.
    Una viejecita le toca el hombro al chófer y le da un gran puñado de cacahuetes sin cáscara.
    El chófer sorprendido le da las gracias y se los come con agrado.
    Pocos minutos más tarde, la abuelita vuelve a venir, el chófer vuelve a agradecerle el gesto y se come los cacahuetes.
    A los cinco minutos, la anciana viene de nuevo con otro puñado.
    El chófer ya no puede comer más y le pregunta:
    - Buena señora, es muy amable de su parte regalándome tantos cacahuetes, pero…… ¿usted no cree que, a lo mejor, sus cincuenta amigos y amigas les apetecerían también unos pocos?
    - ¡ No se preocupe caballero!, no tenemos dientes para masticarlos y sólo chupamos el chocolate que los recubre!
  19. Un rico hacendado permanece de pie en el vestíbulo de su casa leyendo una carta con gesto sumamente preocupado.
    “Señor X, ya le hemos avisado más de una vez y usted parece no hacerse cargo de la situación en que se encuentra. Este es el último aviso: si en plazo de 24 horas usted no ha depositado los cincuenta millones dónde usted ya sabe, nos veremos en la desagradable necesidad de proceder a soltar a su suegra”
  20. Suerte que fui al coche Tras casi un año de salir con mi novia, el próximo mes me caso! La madre de mi novia o futura suegra es genial (además de estar terriblemente buena). Ella solita se ha ocupado de organizar toda la boda: iglesia, música, fotógrafo, banquete, flores, etc.
    Hace poco me llamó y pidió que fuera su casa para revisar la lista de Invitados y anular algunos de los de mi familia pues estaba superando nuestras previsiones.
    Cuando llegué, revisamos la lista y la rebajamos justo por debajo de los ciento cincuenta invitados. Fue entonces cuando me dejó boquiabierto: me dijo que siempre le había resultado un hombre muy atractivo, que dentro de un mes ya sería un hombre casado y que antes de que ello ocurriera, quería tener s**... salvaje conmigo.
    Entonces se levantó, caminó sensualmente hacia el dormitorio y me susurró que yo sabía donde estaba la puerta de salida si lo que quería era marcharme.
    Me quedé de pie, inmóvil, aproximadamente unos tres minutos y finalmente decidí que sabía perfectamente qué camino tomar.
    Me dirigí corriendo a la puerta, salí a la calle y... ya afuera, apoyándose en el capó de mi coche estaba su marido sonriente. Creo recordar que me explicó que únicamente querían estar seguros de que su querida hija se casaba con el hombre adecuado y se les ocurrió esta pequeña prueba que yo felizmente había superado con éxito.
    Me tomó del hombro, y después me abrazó sin yo poder reaccionar ni hablar aún aturdido por las emociones.
    CONCLUSIÓN: "Menos mal que fui a buscar los condones al coche, que si los llego a tener encima... "



chistes de cincuenta

Contar chistes de cincuenta es una parte importantísima de cualquier conversación o reunión social. Los chistes, llenos de humor y diversión, tienen la capacidad de liberar tensiones y crear un ambiente relajado y alegre. Pueden contarse en cualquier situación, siempre y cuando sea apropiado y no ofenda a nadie. Contar chistes puede ser especialmente efectivo para romper el hielo al inicio de un evento social, hacer reír a los demás en medio de una conversación o simplemente alegrar el día de alguien que puede necesitarlo. Sin embargo, es esencial recordar que el sentido del humor puede variar de una persona a otra, y lo que para uno puede ser gracioso, para otro puede no serlo.