Chistes de Comprame
Estos son los 14 chistes de comprame y más graciosos bromas sobre comprame que matan de risa. Lea chistes acerca comprame que sean buenos chistes para niños y amigos en español.
Chistes de comprame para niños y niñas cortos y graciosos
¿Cuál es un buen chiste sobre comprame para hacer reír a la gente? Mira esta lista de historias divertidas que seguramente harán sonreír a todos.
- Esto son un padre y un hijo gitano y el hijo dice:
- aaaaaayy paaaapa ... comprame un chandal de nadalll!!.
y el padre le responde:
- aaayyy, tu lo que quieres es un bañadollll xD - -Papá, Papá cómprame una gorra.
-No.
-Anda Papá cómprame una gorra.
-He dicho que no.
-Venga Papá cómprame una gorra.
El padre enfadado le dice:
-A que cojo un palo y te arranco la cabeza.
Y el niño contesta:
-Sí claro ¡para no comprarme la gorra!. - Una señora le dice a su esposo:
¡Oye mi amor, cómprame unos zapatos!
Y el señor le responde:
¿A cuánto los vendes?
A lo que la mujer contesta:
No seas payaso, cómpramelos porque los necesito mucho.
Y el señor contesta:
Si los necesitas tanto, ¿para qué me los vendes? - Un niño llorando le dice a su papá:
¡Papá, papá, cómprame una muñeca!
El padre le contestó:
Qué dices hijo mío, yo cuando tenía tu edad jugaba con cosas de acero.
Entonces el hijo muy feliz le contestó:
¡Entonces cómprame una plancha! - Un niño le dice a su mamá:
- mamá cómprame un tamborcito
- noo por que lo vas a tocar todo el día y no me dejas descansar. Dice la mamá.
El niño insiste:
- pero no te preocupes por eso no lo voi a tocar todo el día.
- entonces para que lo quieres?
- pues lo voi a tocar toda lo noche - Ba un gitano a una tienda y le dice a su padre papa,papa comprame un chandal del Nadal.
A hijo tu lo que quieres es un bañador - "Papá, ¡comprame un chorizo!"
"¿No que pican?"
"Pues lo cojo por el cordel y ya esta." - Una vez la mamá de Jaimito le dijo:
Ve a la carnicería y cómprame 1 kilo de cochino.
Y Jaimito fue directamente.
Mientras él estaba esperando que el carnicero terminara con el otro cliente, Jaimito se metió el dedo en la nariz, cuando lo vio el carnicero le dijo:
¡Cochino!
Y Jaimito le contestó:
¡1 kilo! - Hijos tontos Dos madres hablan de sus respectivo hijos:
- Tengo un hijo más tonto!
- Pues anda que yo!
Los dos hijos se acercan, y dice la madre 1:
- Anda, Marianico, vete a casa a ver si estoy.
Y el niño se va. Y dice la madre 2:
- Anda Santiaguico, toma esta peseta y cómprame una T.V. en color,
y el niño también se va. Durante el camino, se encuentran los dos,
y dicen:
- Tengo una madre más tonta!
- Pues anda que yo!
- Fíjate, la mía me manda ir a casa a ver si esta y no me da la llave.
- Pues fíjate la mía, que me da dinero para comprar una T.V. en
color, y no me dice de qué color la quiere. - Un día le dice la mamá a Jaimito.
Jaimito por favor ve a la tienda de la esquina y cómprame una docena de huevos.
Jaimito sale de su casa a comprar una docena de huevos, cuando en ese instante hay un accidente increíble entre 5 carros, y Jaimito se queda viendo un largo rato, llega a su casa a las 2 horas y le comenta a su mamá lo del accidente.
Mamá, dice Jaimito, hubo un accidente enorme, había cabezas, piernas, manos tiradas por toda la carretera.
Y su mamá dice:
Aha, ¿y los huevos?
Ah, no sé mamá, todavía no los han conseguido. - Pepito va a la tienda,y se encuentra a su mama y le dice:
- Comprame huevos
Despues pepito se encuentra a su hermano y le dice:
- Comprame un superman
Despues pepito se encuentran a su papa y le dice --Comprame unos cigarros
Despues pepito va gritando,y una señora se le acerca y le dice:
- ¿Que tienes? pepito le responde:
- ¡Huevos...Huevos...Huevos!
La señora le dice:
- ¿Quien te crees? pepito le responde:
- ¡Superman...Superman...Superman!
La señora le dice:
- ¿Que quieres? pepito le responde:
- ¡Cigarros...Cigarros...Cigarros - Niños y madres tontos - ¡Tengo un hijo tan tonto, María!
- ¡No más que el mío, Paca!
Los dos hijos se acercan.
- Anda, Pepito, vete a casa a ver sí estoy.
El niño se va. La otra madre:
- Anda, Manolíto, toma un euro y cómprame un
televisor color.
Los niños se encuentran:
- ¡Tengo una madre más tonta, Pepito!
- ¡No más que la mía. Manolíto!
- La mía me mandó a casa a ver si está ¡y no me ha dado la llave!
- Pues fijate la mía: me da un euro para comprar un
televisor color: ¡y no me ha dicho de qué color lo quiere! - La lavadora Va un hombre por la playa con su mujer, y ella le pide que le compre un bikini, a lo que él le dice:
-Con ese cuerpo de lavadora, ni lo pienses.
Siguen caminando y le insiste la mujer:
- Bueno, cómprame ese vestido.
Y repite el esposo:
- Con ese cuerpo de lavadora ni lo pienses.
Pasa el día y por la noche, ya en la cama, el marido le dice a la esposa:
- Entonces que, vieja ¿echamos a andar la lavadora?
Y la mujer le dice:
- Para ese mugre trapito, mejor lávalo a mano. - Dos dominicanos hablando:
- Mi hijo es un bruto...
- No, el mío es más bruto, ya verás...
- Paco, ¡ven aquí!.
Viene el niño dominicano:
- ¿Qué quieres padre?.
- Ve con este billete de cinco pesos a la tienda y cómprame un televisor de color.
- Ok, ya voy. El niño se va...
- Ja!... ¿has visto?... ¡mi hijo es un bruto!.
- Ya, ¡pero que el mío es MÁS bruto!.
- Pascual, ¡ven aquí!. Se acerca Pascualito:
- ¿Qué quieres padre?.
- Ve a casa a ver si estoy allá...
- Ok, ya voy.
Los dos niños se encuentran en el camino:
- Mira si será bruto mi papá que me ha enviado a comprar un televisor de color con cinco pesos... y no me dijo de qué color lo quería.
- El mío es MÁS bruto aún...
- Me mandó a casa a buscarlo... y ni siquiera me dio las llaves.
Contar chistes de comprame es una parte importantísima de cualquier conversación o reunión social. Los chistes, llenos de humor y diversión, tienen la capacidad de liberar tensiones y crear un ambiente relajado y alegre. Pueden contarse en cualquier situación, siempre y cuando sea apropiado y no ofenda a nadie. Contar chistes puede ser especialmente efectivo para romper el hielo al inicio de un evento social, hacer reír a los demás en medio de una conversación o simplemente alegrar el día de alguien que puede necesitarlo. Sin embargo, es esencial recordar que el sentido del humor puede variar de una persona a otra, y lo que para uno puede ser gracioso, para otro puede no serlo.