Chistes de Dejeme

Estos son los 25 chistes de dejeme y más graciosos bromas sobre dejeme que matan de risa. Lea chistes acerca dejeme que sean buenos chistes para niños y amigos en español.

Tabla de contenidos


Los Mejores Chistes de Dejeme

Estos son nuestros mejores frases chistosas de dejeme. Diviértete con un buen bromas de dejeme en español con sencillo humor de dejeme y fotos para reir.

  1. Llega un señor y le dice al taxista:
    Por favor, déjeme en el semáforo.

    Y el taxista le responde:
    Yo lo dejo en la esquina, y usted verá como sube.
  2. Van dos borrachos en un motor cuando de repente le dice uno al otro.
    -compadre dejeme en la esquina
    a lo que el otro compadre le presponde
    -compadre pero es usted que va manejando



Chistes de dejeme muy buenos y graciosos

Los chistes de dejeme para niños y para amigas muy buenos y graciosos siempre son un éxito en las fiestas. La risa está garantizada cuando se comparten estas dejeme bromas divertidas.

En una calle hubo un accidente muy feo, y un sacerdote quiso saber qué pasaba.

Entonces, le dice al policía:
Por favor, déjeme pasar.
No se puede pasar, le contestó el policía.
Entonces, el sacerdote le dice:
Soy pariente del accidentado.
¡Y el accidentado era un burro!

Un chico vendiendo periódicos gritaba:
¡Extra, extra, 48 personas estafadas en un día!
Un señor que estaba cerca le dice:
Por favor, déjeme uno.
El chico le entrega el periódico al señor y sigue gritando:
¡Extra, extra, 49 personas estafadas en un día!

Déjeme salir a comprar

EMPLEADO: Jefe, ¿puedo salir hoy dos horas antes? Mi mujer quiere que le acompañe a hacer unas compras.
JEFE: De ninguna manera.
EMPLEADO: Gracias jefe, ya sabía yo que usted no me iba a defraudar.

Un oficial de carretera detiene un automóvil
¡Señorita, ha rebasando el límite de la velocidad permitida!
Por favor oficial, déjeme ir. Soy maestra
¿Maestra? ¡Que bien!
Lo hubiera dicho antes, he esperado esto toda mi vida. A ver, escriba mil veces:
No debo rebasar el límite de velocidad permitida

Atraco a un abogado

Un hombre va por la calle y de repente le asalta un encapuchado:
- ¡Dame todo el dinero que lleves!
- No llevo nada, ni billetes ni tarjetas. Dejeme marchar por favor, llego tarde a un juicio.
- ¿Es usted un testigo?
- No, soy abogado.
El atracador se quita la capucha y le dice:
- ¿De verdad? ¿De que año?

Paran a un hombre sospechoso en la aduana y le dicen:
-¿Qué lleva en esa bolsa?
-Llevo comida para mis gatos señor agente.
-Déjeme examinarla. Cuando la abre, encuentra unos veinte relojes Rolex de dudosa procedencia...
-¿Con que comida para sus gatos, no?
-Si señor, yo se lo echo a los gatos, y si no los comen, a veces los vendo...

Rajoy, que visita Inglaterra, es invitado por la Reina Isabel II a tomar el té.

Durante el encuentro, Rajoy le pregunta cuál es su concepto de liderazgo, y ella le contesta: "Rodearse de personas inteligentes".
Entonces, perplejo, Rajoy le pregunta cómo sabe ella si son inteligentes o no.
Lo capto de inmediato, haciendo la pregunta adecuada -contesta la Reina-. Déjeme que se lo demuestre. La Reina toma el teléfono, llama a Tony Blair y le dice:
- Señor Primer Ministro, le ruego que conteste a la siguiente cuestión:
Su madre tiene un hijo, su padre tiene un hijo y este niño, no es ni su hermano, ni su hermana, ¿Quién es?
Tony Blair contesta de inmediato:
- Obviamente, ¡soy yo!
- ¡Correcto! Gracias, dice la Reina. Y cuelga el teléfono.
- ¿Ha entendido, Mr. Rajoy?
- Claro, muchísimas gracias. ¡Sin duda haré la misma prueba!
De vuelta a Madrid, Rajoy decide poner a prueba a Acebes. Cuando lo ve, le dice:
- A ver, Acebes, contéstame a una cuestión.
- ¡Claro, Mariano! ¿Qué deseas saber?
- Tu madre tiene un hijo, tu padre también y este niño, no es ni tu
hermano, ni tu hermana, ¿quién es?
Acebes, un poco confundido, contesta que le gustaría pensarlo bien para dar una respuesta apropiada. Al salir de la Sede del Partido, en Pánico total, organiza una reunión con todos los demás ex-ministros, para analizar la pregunta.
Después de varias horas, sin poder encontrar ninguno de ellos la
respuesta correcta, se les ocurre consultar con el Director de la Real Academia de la Lengua Española.
- Escuche, profesor, le voy a hacer una preguntita fácil.
- Sí, usted dirá, Sr. Acebes.
- Su madre tiene un hijo, su padre tiene un hijo y este niño, no es ni su hermano, ni su hermana, ¿quién es?
El Director de la Academia contesta enseguida:
- Pues, soy yo.
- Ah ¡Claro!
Tranquilizado, Acebes llama corriendo a Rajoy y le dice:
- ¡Ya tengo la respuesta a tu pregunta! ¡¡¡Es el Director de la Real
Academia!!!
Y Rajoy, indignado, le contesta:
- ¡No, i**...! ¡Es Tony Blair!

Estaba un borracho caminando tranquilamente en la calle y de repente se encuentra un muerto tirado debajo de una caseta telefónica y decide llamar a la policía:
Buenas noches, usted está hablando a la estación de policías, ¿cuál es su problema?
He encontrado a un muerto dice el borracho.
Está seguro de que está muerto.
Sí, señor estoy seguro.
Muy bien, en que calle se encuentra.
Espéreme, le vuelvo a llamar ahorita.
Entonces el borracho se dirige a ver el nombre de la calle y apresurado regresa al teléfono y vuelve a marcar.
Buenas noches usted está hablando a la estación de policías, ¿cuál es su problema?
Soy el del muerto.
Ah sí señor, ¿cuál es la calle?
Es... a ver, déjeme volver a ir a ver.
Vuelve a ir a ver el nombre de la calle y esta vez lo va repitiendo en su mente.
Buenas noches, usted está hablando a la estación de policías, ¿cuál es su problema?
Soy yo el del muerto.
Ah sí, usted, ¿cómo se llama la calle?
Ah, es... otra vez se me olvidó.
Va varias veces y siempre a la hora de marcar se le olvida el nombre de la calle.
Hasta que por la décima vez habla:
Buenas noches, usted está hablando a la estación de policías, ¿cuál es su problema?
El del muerto.
Ah otra vez usted, señor, ahora sí dígame como se llama la calle.
Libertad.
Pero por que no lo dijo antes si no está tan difícil.
¡Es que el nombre de la otra estaba tan difícil que mejor moví al muerto!

-Benito Carlos del Toro tenía varios días de que le dolía mucho la cabeza y a pesar de que había visto a varios especialistas, estos no podían quitarle el malestar. Le habían dado toda clase de tratamientos, pero el dolor seguía. Un día, caminaba por la calle con la cara que mostraba muchos signos de dolor y se encuentra a Puto Pelo y este le dice:
-Puto Pelo: Veo que tiene mucho dolor. Si me das dulce de leche, te puedo decir el nombre de un doctor que te puede curar.
-Y Benito le dio dulce de leche.
-Puto Pelo: Ve con el doctor Zacarías Bello Delano.
-Don Benito: Pero, pero, ese es un veterinario.
-Puto Pelo. Ve con él. El te curará.
-En su desesperación, Don Benito Carlos del Toro pensó que no tenía nada que perder. Así que se fue directo a la clínica.
-Zacarías: Eh, le voy a ser honesto. Yo ni siquiera soy veterinario, pero, déjeme examinarlo.
-Después de examinarlo le comentó:
-Zacarías: Mire, yo tengo la solución a su problema. Es muy fácil, lo he resuelto con diferentes caninos. Ay uy, perdón, personas. Su problema se resuelve castrándolo.
-Don Benito: ¡¿Que?! ¡¿Usted establemente?! ¡Jamás voy a permitir que me corten los huevos y el ****! ¡Me largo de esta pocilga!
-Don Benito se fue a casa resignado, pero desafortunadamente Don Benito seguía con su problema: los dolores de cabeza. Ya desesperado y después de evaluar los pros y contras de la castración, acepta el remedio y se dirige a la clínica para probar su última opción.
-Don Benito: Pero, ¡que carajo! ¡Yo no debería estar anestesiado!
-Zacarías: Oh, demonios, sabía que se me estaba olvidando algo.
-Después de una cirugía de 2 horas, se queda sin **** ni testículos. Unos días más tarde, para su sorpresa, ya no le dolía la cabeza. Así siguió por algún tiempo, lo que le dio mucho ánimo y decidió ir con un sastre para que le hicieran un traje nuevo. Se sentía renovado. Así que decidió buscar a Puto Pelo para que le recomendara un sastre. Después de buscarlo todo el día, lo encontró en un reconocido bar.
-Puto Pelo: Si me das dulce de leche, te recomiendo un sastre.
-Don Benito: Mira, Puto Pelo, yo hablaba de ti de todas tus recomendaciones, pero después de que me recomendaste con ese hombre y me solucionó esos problemas de cabeza, lo único que tengo hacia ti son agradecimientos. Así que mande un tráiler de dulce de leche para tu casa.
-Puto Pelo lo mandó con Jaimito, el mejor sastre de la ciudad. Muy reconocido por la gente por su capacidad de detectar el gusto y las necesidades de las personas. Llega Don Benito y Jaimito le dice:
-Jaimito: Bienvenido. Pase usted, buen hombre. Si quiere un traje talla 38, yo se lo puedo hacer en 2 días.
-Don Benito lo podía creer. ¿Cómo podría Jaimito la talla sin haberlo medido? Entonces le pregunta:
-Don Benito: A ver, a ver, no lo entiendo. ¿Cómo le hizo para saber mi medida? A poco, ¿también sabe el número de talla de mi pantalón?
-Jaimito: Claro, yo se todo. Tengo muchos años de experiencia. Le puedo decir la talla del pantalón, la camisa, corbata y hasta la de los calzoncillos.
-Don Benito: Usted me está mintiendo. Lo dudo mucho. Pero, a ver, dime las medidas de todo.
-Jaimito: A ver, veamos: Zapato 10.5 americano. El pantalón de cintura 36 y de largo 32. La camisa al cuello 16.5 y de largo 15 pulgadas y sus calzoncillos son talla 35. ¿Cómo lo ve?
-Don Benito: Muy impresionante. Usted podrá ser un buen sastre, pero no le acierta todo. Ejemplo: Las medidas del pantalón, los zapatos y la camisa que dijo fueron correctas, pero con la medida del calzoncillo no acertó porque yo no uso 35. Yo siempre me pongo la medida 32.
-Jaimito: Se equivoca, amigo mío. Si usted usa calzoncillos talla 32, le va a apretar muchísimo los testículos y el **** y eso le va a causar unos dolores de cabeza insoportables.

En una ciudad pequeña, un agente de tráfico detuvo a un joven conductor que iba a gran velocidad por la calle principal. El joven empezó a protestar:
Señor agente, déjeme que le explique.
¡Silencio! Lo retendré hasta que regrese mi jefe.
El muchacho insistía:
Pero señor oficial, escúcheme, tengo prisa.
El agente replicó:
¡Cállese! ¡Ahora mismo, a la cárcel!
varias horas después, el guardia fue a ver al detenido y le dijo:
Ha tenido usted suerte, el jefe asiste a la boda de su hija, cuando regrese estará de buen humor y seguro que le perdona.
No esté tan seguro, replicó el joven, ¡Yo soy el novio!

Va un niño a la farmacia y dice:
- Déjeme un condón, que hoy voy a casa de mi novia y seguro que cae, bueno déjeme otro más porque tiene una madre que está bien buena y seguro que también cae. Va llega la noche y el niño con la cabeza agachada mirando el plato y sin decir nada, termina la cena y le dice la novia:
- No sabia que eras tan tímido? Y dice el niño:
- Y yo no sabia que tu padre era farmacéutico!?

Era una vez un señor k tenia un burro pero era tan Tristen que el dueno Dijo doy $1000 dolares al que lo aga reir y todos trataron pero nadie Pudo asta que llega un senor y le dice "dejenme A Solas con el burro" y pasaron 10 minutos cuando Salen el burro no podia dejar de reirse y le dice el señor "deme mi dinero" y ya se lo dio pero despues el grangero se canso de el burro que dijo doy otros $1000 dolares al que lo aga llorar y ya otra vez todos trataron pero nadie pudo y llega el mismo señor deantes y le dice "dejeme a solas con el burro" y pasaron 10 minutos y ya despues salieron Los dos pero el burro salio llorando y le dice el señor. "mi dinero" y le dice el granjero primero digame Como lo hizo reir y despues llorar y el otro le dice "para reir le dige k mi v**... era mas grande que la de el y para llorar se la ensene" hahaha:)

Suena el teléfono a las 6 de la mañana en la recepción del hotel, y dice un borracho a la recepcionista:
Señorita, ¿Me puede decir a qué hora abren la barra?
Ella le contesta:
A las 5 de la tarde, pero déjeme decirle que con la borrachera que tiene no lo van a dejar entrar.
Y el borracho le contesta:
Si yo no quiero entrar, lo que quiero es salir, pues me quedé aquí anoche.

DOMICILIO EQUIVOCADO
El señor y la señora Campos llevaban ya bastantes años de casados y no
habían logrado tener familia. Suspiraban los dos por un hijo. A muchos
doctores consultaron y recurrieron a todos los tratamientos,
pero sin resultado alguno. Por fin un medico encuentra la causa del problema: el
marido era estéril, no podía engendrar.
- "Que debemos hacer doctor?" Preguntan ambos.
- "Algunas parejas recurren a la fecundación artificial, pero es muy costoso
y se usa de preferencia cuando la mujer tiene problemas para quedar
embarazada, y suele fallar. Otras parejas utilizan algo mucho
más sencillo y natural, buscan a un padre sustituto." Dice el médico.
- "Que es un padre sustituto? Pregunta la señora.
- "Es un hombre escogido con cuidado que hace por una sóla vez las
funciones del esposo, de modo que la mujer queda embarazada." La señora
vacila un poco, pero su marido le dice al doctor que el no tiene
inconveniente en adoptar aquello con tal que su esposa vea realizada su
ilusión de ser mama. Y en efecto, pocos días después, por intermedio del
doctor, se contrata a un joven y se hace la cita para que el siguiente
domingo por la mañana, ausente el marido de la casa, vaya a visitar a la
señora y cumpla su tarea.
Sucedió sin embargo que un fotógrafo de niños que había sido llamado a una
casa cercana para retratar a un bebé se equivocó de domicilio y llegó al de
la señora:
- "Buenos días, vengo por lo del niño", se presenta el fotógrafo.
- "Siiii...., pase usted, gusta tomar algo?", Dice tímidamente la señora.
- "No, gracias. El alcohol no es bueno para mi trabajo. Lo que quisiera es
comenzar cuanto antes", dice el fotógrafo.
- "Muy bien!!!, le parece si vamos a la habitación?, dice la dueña de la
casa.
- "Puede ser allí, pero también me gustaría uno aquí en la sala, dos en la
alfombra, otro en el jardín...."
- "Pues cuántos van a ser?", se alarma la señora.
- "Ordinariamente son cinco en cada sesión, pero si la mama coopera pueden
ser más, depende...." y sacando del portafolios un álbum le dice:
"Me gustaría que antes viera algo de lo que he hecho. Tengo una técnica
especial y única que ha gustado mucho a todas las señoras. Mire el retrato
de este niño tan bonito. Lo hice en un parque público,
a plena luz del día. ?? Cómo se juntó gente a verme trabajar!!. Esa vez me
ayudaron dos amigos porque la señora era muy exigente. Con nada le podía yo
dar gusto. Para colmo tuve que suspender el trabajo porque llego una ardilla
y comenzó a mordisquearme el equipo".
La señora estupefacta oía todo! Y seguía el fotógrafo:
- "Ahora, vea estos mellizos, en esta ocasion sí que me luci; todo lo hice
en menos de cinco minutos. Llegue y paf! paf! Dos tomas y mire los gemelos
que me salieron".
La señora estaba cada vez más asustada. Y seguía el fotógrafo:
"Con este niño batalle un poco mas porque la mama era muy nerviosa, hasta
que le dije: 'Mire señora, usted volteese al otro lado y dejeme a mí hacer
todo". Ella se volteó y así pude hacer mi trabajo.
A estas alturas la señora estaba al borde del desmayo! Y el fotógrafo,
guardando su álbum:
- "Quiere que comencemos, señora?
- "A la hora que usted diga", dice la señora
- "Muy bien dice el fotógrafo poniéndose de pie. Permítame nada más ir a la
camioneta y traer mi trípode."
- "Trípode???" pregunta espantada la señora.
- "Si, comenta el fotógrafo. Es que, usted sabe, mi aparato es muy grande y
necesito un trípode para apoyarlo, porque ni con las dos manos puedo
sostenerlo!.
SEÑORA.... SEÑORA!!!!!!.... "Cresta! por qué se desmayaría esta señora???".

Un cura estaba limpiando el altar en su iglesia cuando entra un hombre con cara de asombro y se queda plantado delante de la estatua del Santo Padre con la mano extendida. El cura, entre preocupado e indignado, sigue con sus quehaceres sin quitar el ojo al molesto personaje, y así pasa el tiempo. Al cabo de una hora el hombre con gesto de enfado susurra a la estatua:
Por favor, date prisa que llego tarde.
El cura no puede más y totalmente enfadado increpa al hombre:
Pero desdichado, ¿Qué estás haciendo?
A lo que el hombre responde:
Mire, a mí déjeme en paz, yo lo único que hice fue dar una lismona al pobre de la entrada y él me respondió Dios se lo pagará, y a eso vengo.

- Doctor, doctor, fíjese que no me aguanto de ir al baño y siempre me hago pipí El otro día fui al cine y cuando acabó la película ya estaba todo mojado y ni cuenta me había dado.
El doctor lo analiza y le dice:
- Pues no mi amigo, no encuentro el problema, esto es para un especialista, déjeme recomendarle un urólogo
Al tiempo que abre el cajón donde guarda las tarjetas de presentación, pero el doctor se equivoca y la da la de un psicólogo.
Tiempo después encuentra al paciente y le pregunta:
- Oiga amigo ¿Cómo le fue con su problema?
- Muy bien doctor, el especialista que me recomendó es muy bueno
- ¿Ah sí? ¿Entonces ya no se hace pipí??
- Si, todavía me hago, pero ya no me importa

Estaba un señor en un palenque de gallos y llevó a su perico.

Cuando empezaron las peleas de gallos, había un gallo que siempre ganaba sin una herida. El perico miraba que el gallo había ganado muchas veces, entonces le dice a su amo:
Patroncito, patroncito, déjame pelear con este gallo para enseñarle que no sólo él puede.
Y le dice su amo:
¿Estás loco? ¡Te va a matar!
No, ahorita le voy a enseñar que también los pericos pueden, ándele no sea malo, déjeme ir.
No, tu estás loco.
No patroncito, ándele por favor.
Bueno, está bien, pero que conste que te lo dije.
Y los meten al palenque al perico y al gallo y le ponen la navaja y los sueltan en medio del palenque.
Después de un rato regresa el perico cansado y gritando pues el gallo le había pegado un navajazo y regresa con su patrón y le dice:
¡Patroncito, patroncito, présteme su pistola este gallo trae machete!

Carlos lleva a su bella mujer a la clínica para que sea sometida a una complicada operación.

El médico le informa que los resultados solo se sabrán hasta dentro tres días, después de la recuperación.
Apenas se completaron los 3 días Carlos llama a la clínica para enterarse del estado de su hermosa mujer, y le contesta la recepcionista:
-Buenos días, Clínica Municipal, a sus ordenes...
-Gracias señorita, llamo para averiguar por el estado de la paciente del 421 que fue operada hace tres días...
-Muy bien, ya lo comunico con el médico a cargo.
Mientras Carlos espera la comunicación, las lineas telefónicas se cruzan y resulta comunicado con un taller de reparación de motos en donde alguien pregunta por su Yamaha; hay un ruido de interferencia, y Carlos pregunta:
-Hola, ¿me escucha bien?
-Si señor, y no se preocupe en cuestión de 2 días se la entregamos...
-Ah, eso quiere decir que todo salió bien ¿Verdad?
-Si, muy bien, aunque se presentaron más dificultades de las que esperábamos. Tenia varias piezas desgatadas, pero ya se las cambiamos. Yo creo en 2 días ya la puede montar de nuevo...
-¿Montarla de nuevo?
-Si, la puede montar de nuevo sin ningún problema. Le cambiamos el tubo de admisión que ya estaba carcomido. Se ve que usted le da con frecuencia... el desgaste interior lo demuestra. Debería aceitarla cada 8 días... Además, su pistón ya está muy usado; no tiene valor. Para probarlo, le metimos un pistón más grueso que el suyo y los resultados fueron excelentes. También le ampliamos el tubo de escape que ya tenía una gruesa capa de orín...
-¿Tubo de escape? ¿Orín? -pregunta Carlos desconcertado.
-Si, el tubo de escape por donde salen los gases...Es que estaba obstruido, pero ya quedó perfecto...
-Un momento, -dice Carlos y trata de agregar... déjeme decirle que ...
-No, Usted no diga nada hasta que no la vea: ¡Yo personalmente la probé, luego la han montado 5 de mis colegas, y con todos se ha portado de maravilla!

Una vez un tipo entra a una tienda de revistas y le dice al vendedor:
Disculpe señor, busco un libro lleno de emoción que uno al leerlo sienta una gran atracción a él, y que no pueda dejar de leerlo.
Entonces el vendedor le dice:
Sí señor, tengo lo que busca, este es un libro que lo atrapara de principio a fin, este libro trata de asesinatos que se suscitan en una mansión y nadie puede resolver el misterio de quién era el asesino.
Entonces, el señor mostrando interés en el libro le dice:
Perfecto, me parece perfecto ese libro, ¿cómo se llama?
Así, déjeme ver el libro, se titula el Mayordomo Asesino.

Un hombre prende fuego a su chaqueta al encender un cigarrillo, inmediatamente el mecánico de un taller de coches se quita el pantalón y empieza a dar con él sobre las llamas del pobre desgraciado.
Por favor, déjeme quemar.
Ni lo piense hombre, yo le ayudo.
¡No! ¡No! ¡Déjeme quemar por favor!
Que no hombre, que yo le salvo.
Pues por lo menos, saque la llave inglesa del bolsillo del pantalón.

En una frutería estaba la persona que atiende, y llega un fulano fornido, alto y le dice al encargado:
Oiga joven, ¿Cuánto cuesta esta sandía?
Y el otro le contesta:
15 pesos.
Entonces, véndame media sandía.
No señor, no puedo venderle media sandía.
¿Pero, por qué, yo solamente quiero media sandía?
No puedo, porque si la parto se me pierde la otra mitad se pudre señor, le contesta ya enfurecido y sacado de onda. Entonces, dice con un vozarrón:
Déjeme decirle al patrón a ver que dice.
Entra a un cuartucho que estaba en el fondo del negocio, y no se dio cuenta que su cliente lo había seguido y le dice al patrón:
Jefe allá afuera está un tipo que quiere que le venda media sandía y lo mandé por un tubo, le dije que no se podía pero el muy terco necio, insiste.
El encargado le dijo a su jefe pestes del cliente, pero no se dio cuenta de que estaba atrás de él, y le toma el hombro.
¡Cómo dijo!, con voz de enojado.
Y el encargado dice:
Ah, mire jefe y aquí este joven quiere la otra mitad. ¿Qué dice, se la vendemos?

Una pareja de esposos que no se soportan deciden divorciarse y acuden al juez para que los separe.


El magistrado pregunta las razones de la separación y después de escucharlas está de acuerdo con los argumentos, pero les advierte de que lo único que falta por establecer, es quién se quedará con la custodia del nene y le pide a la mujer que exponga sus argumentos:
- Señor juez, mire, déjeme decirle que no veo por qué usted me pueda quitar a mi nene, si fui yo quien lo tuvo en el vientre durante nueve meses. Luego de eso lo amamanté; después lo crié porque su padre es un irresponsable, que creo que nunca lo quiso.
Luego de ese discurso, el magistrado le dice al padre que hable:
- Señor juez, para no dar tanto discurso como esa mujer, se la voy a poner fácil:
Si usted quiere adquirir un refresco en una máquina, le mete las monedas para que esta le de la bebida.
Entonces, si usted introdujo las monedas, ¿de quién es el refresco, suyo o de la máquina?.

Un granjero demandó a una empresa de buses por las lesiones que sufrió en un accidente.

En el juicio, el abogado de la empresa le pregunta:
¿Acaso no le dijo usted 'estoy muy bien' al policía que lo auxilió?
Déjeme explicarle lo que pasó, yo llevaba a mi yegua en el platón de la camioneta...
¡No le pedí detalles, limítese a responder la pregunta! ¿Le dijo usted, sí o no, que estaba muy bien al policía que le ayudó?
Como le venía diciendo, llevaba a mi yegua en el platón de la camioneta y de pronto apareció un bus de su empresa...
¡Señor juez, estoy tratando de demostrar que esta persona le dijo que estaba muy bien a un policía, inmediatamente después del accidente!, ahora después de varias semanas, él demanda a mi cliente y eso se llama fraude. ¡Por favor, dígale que responda la pregunta!
El juez le explica al abogado que está interesado en escuchar la historia del granjero y le pide a éste que continúe.
Pues yo llevaba a mi yegua en el platón de la camioneta y de pronto, en un cruce, me topé con un bus que se comió la señal de pare y me estrelló de lado. Yo quedé paralizado por el golpe y la impresión, pero escuchaba que mi yegua gemía como loca, presa del dolor. Unos minutos después, llegó la patrulla de policía y un agente se bajó alarmado por los gemidos de mi yegua. El policía la examinó y finalmente sacó su arma y le pegó un tiro en medio de los ojos. Luego, vino hasta mí y me dijo, "su yegua estaba muy mal y tuve que pegarle un tiro para que no sufriera", ¿Usted cómo se siente?

Los chistes son una forma popular de entretenimiento que típicamente consta de una anécdota o historia cómica con un final sorpresivo y gracioso. Existen muchos géneros de chistes, como los chistes de niños, los chistes de adultos, entre otros. El propósito principal de los chistes es provocar risa, normalmente atravesando conceptos o situaciones comunes en la vida de una manera humorística y a menudo irónica. La habilidad de contar chistes y hacer reír a las personas es una gran forma de romper el hielo y de conectar con los demás.

chistes de dejeme

Contar chistes de dejeme es una parte importantísima de cualquier conversación o reunión social. Los chistes, llenos de humor y diversión, tienen la capacidad de liberar tensiones y crear un ambiente relajado y alegre. Pueden contarse en cualquier situación, siempre y cuando sea apropiado y no ofenda a nadie. Contar chistes puede ser especialmente efectivo para romper el hielo al inicio de un evento social, hacer reír a los demás en medio de una conversación o simplemente alegrar el día de alguien que puede necesitarlo. Sin embargo, es esencial recordar que el sentido del humor puede variar de una persona a otra, y lo que para uno puede ser gracioso, para otro puede no serlo.