Chistes de Dijeran

Estos son los 19 chistes de dijeran y más graciosos bromas sobre dijeran que matan de risa. Lea chistes acerca dijeran que sean buenos chistes para niños y amigos en español.


Chistes de dijeran para niños y niñas cortos y graciosos

¿Cuál es un buen chiste sobre dijeran para hacer reír a la gente? Mira esta lista de historias divertidas que seguramente harán sonreír a todos.

  1. En el banco de un parque dos amigos:
    -Estoy leyendo un libro buenísimo: 'Moral y paz interior'.
    ..
    -Yo ya lo leí, si me lo dijeras antes te lo prestaba...
    -Es igual que lo robé en la biblioteca!
  2. Era una vez una iglesia con el techo tan, pero tan bajo, que en lugar de que el padre dijera podéis sentaros decía cuerpo a tierra.
  3. Nació un bebé vampiro, todos estaban esperando que dijera su primera palabra y dijo:
    Ajó y se murió.
  4. Va Pepito a la escuela donde le decían empanada. El ya estaba aburrido que le dijeran así. Va al siguiente día y dice:
    El próximo que me diga empanada lo mató.
    Llega uno de los pelaos y le dice empa y pregunta Pepito:
    ¿Qué dijiste?
    Nada.
  5. Había una vez una señora que no le gustaba que le dijeran coja. Entonces, un tipo le apuesta a otro señor esto:
    A que le digo a la señora un montón de veces, "coja".
    El tipo que hizo la apuesta puso un montón de telas y le dijo a la señora:
    Usted escoja, usted escoja, usted escoja, usted escoja...
  6. Lo conoces En lepe...
    - Oiga, ¿conoce a José Fernández López?.
    - Pues así en frio, no caigo, ¿quizás si me dijera el apodo?.
    - Le llaman el Puntillita.
    - Pero c**... si soy yo
  7. El jefe revisa una carta que acaba de escribir a la secretaria.
    - Tendrá que borrar algunas palabras señorita.
    - ¿Cuáles señor?
    - La verdad es que cuando le dije que sus ojos eran bonitos, no era para que se lo dijera al cliente.
  8. Un Médico se enamoró y decide casarse con una mujer que no tenía mucha preparación ni modales.
    Un día la lleva a cenar a casa de sus padres. En medio de la cena, ella se levantó y dijo:
    - Ya vengo! Voy a mear!
    El hombre, muy avergonzado, esperó hasta regresar a casa y le dijo que debía aprender a ser más discreta y que la próxima vez que necesitara ir al baño, dijera "con permiso, voy al tocador".
    Una semana después, durante otra cena, la joven se levanta y dice:
    - Con permiso, voy al tocador…
    Los presentes no dicen nada y su esposo, muy contento, le dice:
    - Mi amor, no te tardes...
    Y ella responde:
    - No te preocupes amor, tú sabes que yo cago rapidito!
  9. Había una vez un loro que tenía un dueño pelado, y por eso el loro siempre le estaba diciendo:
    Pelado, pelado, pelado, pelado.
    Un día el dueño se cansó que le dijera pelado y le dijo al loro:
    ¡La próxima vez que me digas pelado te tiro por el inodoro!
    Al loro no le importó y le siguió diciendo:
    ¡Pelado!
    Entonces el dueño lo tiró por el inodoro, pero como un loro no entra por el inodoro quedó ahí medio acurrucado.
    Un día el dueño va al baño y el loro le dice:
    ¡Che pelado, te hiciste la raya al medio!
  10. Un hombre ya mayor va a la consulta de una experta en cuestiones sentimentales con la intención de exponerle el problema que le preocupa.
    - Mire, yo tengo 60 años y estoy perdidamente enamorado de una chica de 18. ¿Cree usted que ella me aceptaría si yo le dijera que, en vez de 60, tengo 50? ¿Tengo alguna posibilidad?
    - Depende... ¿Es usted rico?
    - Bueno he juntado algunos millones.
    - En ese caso, le aseguro que todo está resuelto.
    - Entonces, ¿le diré que tengo 50 años?
    - ¡Al contrario, le dirá que tiene 80!
  11. Está la Pepsi negociando un tratado con el Papa, para conseguir que en vez de decirse en misa "el pan nuestro de cada dia" se dijera "la pepsi nuestra de cada día". Entonces la Pepsi le dice:
    - Le damos 200.000.000.000 dólares.
    El papa dice que no, pero la pepsi contesta:
    - OK, le damos 800.000.000.000.000 dólares, y el Papa se queda pensando y llama a su ayudante:
    - ¿Oye, hasta cuando nos dura el contrato con los panaderos?.
  12. Tres amigos están en el funeral de un compañero de trabajo. Uno de ellos, mirando al difunto, exclama:
    -Yo quisiera que cuando muera, la gente me mire y me recuerde por algo grande que haya logrado en la vida.
    -Es verdad, yo también quisiera que la gente me mirara y dijera: Fue un gran hombre y mejor amigo.
    El tercero escuchaba atentamente a sus amigos sin hacer comentarios, lo que ocasionó la pregunta de éstos:
    -¿Y a ti, qué te gustaría que dijeran?
    -¿De mí? A mí me gustaría que me miraran y dijeran: ¡Uy, mirá, parece que se está moviendo!
  13. dice la profesora de jaimito a la clase k oy iba a venir aznar a clase asike cuando bajara del coxe tendrian k decir todos juntos bien biennn! y cuando subieran las escaleras dijeran ¡k lo repita k lo repita!y cuando entrara en clase dijeran ¡aznar aznar aznar! entonces yega aznar se baja del coxe pisa una m**... y todos los niños dicen bien bien biennn! sube x las escaleras se cae y dicen todos k lo repita k lo repita y yega jaimito se tira un p**... y dice la prfesora ken a sido? entonces entra aznar y dicen todos aznar aznar aznar!
  14. El cuervo parlanchin En una aldea, un cuervo entra volando en la casa de un muchacho que vive solo, se posa en su hombro y le dice:
    -Si me das 10 granos de maíz, ahora y 10 después, c**...,te consigo una mujer para hacer el amor. Yo sé cuando tienen ganas,
    El joven le da los 10 granos de maíz, el cuervo se los come, y le dice el joven.
    -Venga, vete a buscar esa mujer.
    El cuervo se va volando, se posa en la reja del huerto del joven, pasa una veinteañera por su lado y le dice:
    -¿Un polvo, Carmiña?
    -¡A tu madre le vas a echar un polvo!
    -No te pongas así, bonita, yo sólo digo lo que me dijo el Venancio que te dijera... Por cierto, dijo que te echaría cinco polvetes, yo creo que exagera.
    La muchacha, enojada, llama a la puerta de la casa del Venancio, que abre la puerta, a torso descubierto, enseñando su musculatura de herrero.
    -¿Qué quieres, Carmiña?
    -¿Le mandaste al cuervo decir las tonterías que dijo?
    Piénsate bien lo que respondes, ya sabes que mi marido es capador.
    -¡¿Yo?! Es él, dice que nota cuando una mujer tiene ganas.
    -¿Tengo cara de pasar hambre?
    -¡Yo qué sé! Una cosa es cierta, aún siendo la mujer del capador, si tuvieras ganas, te echaba media docena.
    Carmiña, viendo que el joven está como un queso, y que lleva meses a pan y agua, se mete en la casa del Venancio y sale dos horas más tarde. Entra el cuervo y le dice al joven:
    -Mis 10 granos de maíz, c**....
    Venancio le da el maíz:
    ¿Quién te enseñó a decir, c**...?
    -A ti que te importa, c**....
    Al día siguiente le dice Venancio al cuervo:
    -Hoy quiero que me traigas a alguien que sea especial.
    -Como tú digas, c**....
    Poco después llaman a la puerta, Venancio abre a torso descubierto, y en la puerta está una vieja, fea como un demonio, tuerta, coja y jorobada, que le dice:
    -Tira para dentro si no quieres que el capador sepa que te tiraste a su mujer-
    Tres horas más tarde sale la vieja con una sonrisa de oreja a oreja, el cuervo se posa en su hombro y le dice:
    -¿Me tienes el maíz preparado?
    -Tengo, c**....
  15. Un joven a quien no le gustaba que le dijeran limonada se compró un rifle para dispararle al primero del barrio que lo llamara con ese sobrenombre.
    Sus compañeros del vecindario lo sabían y cuando lo vieron pasar se pusieron de acuerdo:
    Uno empezó y dijo hielo, el otro gritó agua, y ya en ese momento el joven limonada levantó su rifle en señal de cólera, el otro gritó limón y enseguida el joven limonada apuntó su rifle a los cuatro y el último dijo azúcar, en ese instante, el joven a quien le decían limonada dijo enojado:
    Si lo revuelven los mató a todos.
  16. El ingés de Jaimito Un profesor de Inglés que estaba harto de que un alumno suyo no pasara de curso por sólo suspender su materia, entonces decidió hacerle un pequeño examen para ver podía pasar.
    - A ver Jaimito, si yo te dijera: "open the window", ¿qué sería?
    Y Jaimito responde:
    - Window, window, eso es de los ordenadores, ¿no?
    - No Jaimito, no es de los ordenadores, es abrir la ventana.
    - A ver, otra, ¿qué es "close the window"?
    Jaimito responde:
    - Otra vez lo de lo ordenadores, ¿no?
    - No Jaimito no, si "open the window" es abrir la ventana, "close the window" será cerrar la ventana.
    - A ver, la última oportunidad Jaimito, ¿qué es "good morning"?
    Jaimito dice:
    - ¡Ah!, esta sí que la sé, good morning es, la ventana entre abierta.
  17. Las clases de inglés de Jaimito
    Un profesor de Inglés que estaba harto de que un alumno suyo no pasara de curso por sólo suspender su materia, entonces decidió hacerle un pequeño examen para ver si podía pasar.
    - A ver Jaimito, si yo te dijera: "open the window", ¿qué sería?
    Y Jaimito responde:
    - Window, window, eso es de los ordenadores, ¿no?
    - No Jaimito, no es de los ordenadores, es abrir la ventana.
    - A ver, otra, ¿qué es "close the window"?
    Jaimito responde:
    - Otra vez lo de lo ordenadores, ¿no?
    - No Jaimito no, si "open the window" es abrir la ventana, "close the window" será cerrar la ventana.
    - A ver, la última oportunidad Jaimito, ¿qué es "good morning"?
    Jaimito dice:
    - ¡Ah!, esta sí que la sé, good morning es, la ventana entre abierta.
  18. Un hombre tuvo que quedarse del trabajo para atender a las cortes por una pequeña citación de tráfico. Se estaba cansando de esperar hora tras hora para que lo llamaran.
    Cuando lo llamaron esa tarde, se presentó al juez sólo para que le dijera que había terminado el día y que tendría que volver el próximo.
    ¿Para qué?, le gritó al juez.
    El juez, también cansado después del día que había pasado le gritó:
    ¡Veinte dólares, desacato al juez.
    ¡Eso es por qué!
    Luego, dándose cuenta de que el hombre sacaba la cartera para mirar el dinero que tenía en ella, le dijo:
    No se tiene que preocupar, no tiene que pagar ahora.
    El hombre respondió:
    Sólo estoy mirando a ver si tengo suficiente dinero para unas cuantas palabras más.
  19. Una vez un muchacho que se llamaba Jesús y quería ir al cine pero no tenía zapatos así que se fue con un amigo y le dijo:
    Amigo, préstame tus zapatos porque quiero ir al cine, y el amigo le dijo que no porque se los podía robar y Jesús le dijo que no y que de una vez le dijera dónde estaba el cine y entonces se los prestó y le dijo:
    Mira, donde veas mucha gente ahí te metes.
    Y se fue y vio mucha gente y que se mete, y era un templo. Después de un rato el amigo lo fue a buscar, en ese preciso momento el cura estaba haciendo misa y decía:
    Jesús se fue al cielo...
    Entonces el amigo grita:
    ¡Deténganlo, que no se vaya porque se lleva mis zapatos!



chistes de dijeran

Contar chistes de dijeran es una parte importantísima de cualquier conversación o reunión social. Los chistes, llenos de humor y diversión, tienen la capacidad de liberar tensiones y crear un ambiente relajado y alegre. Pueden contarse en cualquier situación, siempre y cuando sea apropiado y no ofenda a nadie. Contar chistes puede ser especialmente efectivo para romper el hielo al inicio de un evento social, hacer reír a los demás en medio de una conversación o simplemente alegrar el día de alguien que puede necesitarlo. Sin embargo, es esencial recordar que el sentido del humor puede variar de una persona a otra, y lo que para uno puede ser gracioso, para otro puede no serlo.