Chistes de Huevito

Estos son los 5 chistes de huevito y más graciosos bromas sobre huevito que matan de risa. Lea chistes acerca huevito que sean buenos chistes para niños y amigos en español.


Chistes de huevito para niños y niñas cortos y graciosos

¿Cuál es un buen chiste sobre huevito para hacer reír a la gente? Mira esta lista de historias divertidas que seguramente harán sonreír a todos.

  1. Había una vez un huevito en el Polo Norte, entonces se rompió y dijo:
    Pi, pi, pi, pi, pi, p**.
    .. frío que hace aquí.
  2. habia una vez un tomate una cebolla y un huevo entonces el tomate dijo cuando grande quiero ser un gran tomaton la cebolla dijo cunado grande quiero ser un gran cebollon entonces el huevo lloraba y el tomate le dijo porque lloras huevito por que cuando grande voy a ser un gran guevon..
  3. Havia una vez un tomate y un huevito conversabdo y el tomate le dice cuando sea grande voy a ser un tomaton-y el huevito se puso a llorar porque de grande va ser un huevon.
  4. Iba un huevito y un tomate caminando por la calle, cuando el tomate dice:
    Cuando sea grande, voy a ser un tomatón y el huevito se puso a llorar.
  5. Una mañana un huevito se encontró perdido en medio de un pueblo pobre, pobre, pobre.
    Estaba buscando la salida del lugar en medio de calles solitarias, cuando de pronto vio a un poblador hambriento asomar la cabeza por una esquina y que lo miraba con ojos que parecían decir:
    Ah, que suerte, ¡Qué rico desayuno!
    Entonces, se dio media vuelta y comenzó a caminar en sentido contrario. El poblador empezó a seguirlo. El huevito sin detenerse vuelve la cabeza y nota que ya son dos los pobladores que lo siguen y apura el paso. Mira otra vez y son cuatro, y luego eran diez, y luego veinte; vuelve a mirar y ve toda una turba corriendo tras él. Entonces, el huevito se pone a correr desesperado, en su afán de huir da vuelta por una esquina y se encuentra con un bistec (carne de res a la parrilla) descansando apoyado en una pared y muy tranquilo. El huevito le dice gritando y sin dejar de correr:
    ¡Corre, salva tu vida, atrás viene una turba! ¡Corre!
    A lo que el bistec tranquilo responde:
    Corre tú, el lio es contigo.
    ¡Porque a mí, en este lugar nadie me conoce!