Chistes de Ibamos

Estos son los 15 chistes de ibamos y más graciosos bromas sobre ibamos que matan de risa. Lea chistes acerca ibamos que sean buenos chistes para niños y amigos en español.


Chistes de ibamos para niños y niñas cortos y graciosos

¿Cuál es un buen chiste sobre ibamos para hacer reír a la gente? Mira esta lista de historias divertidas que seguramente harán sonreír a todos.

  1. Una madre va por la calle llamando a su hijo:
    - ¡coné, coné!

    Una señora que pasaba por ahí le pregunta:
    - ¿Por qué le llama coné?
    - Porque cuando le ibamos a bautizar, el cura nos preguntó:
    - ¿Cómo se llama el niño?
    - Pues, Ugenio.
    Y el cura respondió.
    - ¿Será con É?
    - Pues como usted diga, le dijimos.
    Y por eso se llama coné.
  2. Leperos charlando Le contaba un lepero a otro
    - Ibamos yo y Manolín
    - No, íbamos Manolín y yo
    - Vale, listo, yo no iba.
  3. Me he liao tia!! Una chica que llega al bar con un montón de preservativos en una mano y en la otra 15 bates de beisbol.
    Las amigas que la ven llegar, muy serias le preguntan!!
    -¿¡Pero adonde vas con eso!?
    - ¡¡Que me he liao tia, que me he liao, no sabía se íbamos a foll-ar un montón o a montar un follón!!
  4. Íbamos yo y Nacho.
    No hijo, íbamos Nacho y yo.
    ¿Cómo? ¿entonces yo no iba?
  5. Esto es una rotonda donde todas las motos que pasan se chocan.Va un dia ,pasa un motorista y se choca,pasa otro y tambien se choca.Y pasan dos monjas y no se chocan.Les dice el policia:porque no os habeis chocado?y las monjas dicen:poruqe ibamos con dios.y dice el policia:multa por ir tres.
  6. Un sobrino, le pregunta a su tía:
    ¿Dónde está el pajarito, tía?

    Yo no tengo mascotas, Pepito.
    ¡Pues papá me dijo que íbamos a ver a la cotorra de la tía!
  7. Un hombre y una mujer acababan de conocerse en una reunión social y estaban conversando. El tema eran sus matrimonios anteriores.
    Yo perdí a mi marido en el mar, dijo la señora.
    Lo siento mucho, replicó el caballero, ¿Se lo llevaría una corriente mientras nadaba?
    ¡No, que va!, íbamos en un crucero y se lo llevó una rubia despampanante.
  8. A la tercera va la vencida La esposa despierta al marido en la madrugada:
    - Cielo, se ha metido un hombre en la cama y me ha hecho el amor!
    - ¿Y por qué no has gritado antes, DESGRACIADA?
    - Porque creí que eras tú, pero cuando íbamos por la tercera vez empecé a dudarlo.
  9. Resulta que a Jaimito y a toda la clase le mandan a realizar una composición sobre el día de la madre con la expresión: ¡Madre solo hay una!
    Pues bien, al día siguiente todos los muchachitos llevan su composición y la maestra dice: A ver Luisito léame su composición.
    Luis declama:
    Iba yo cabalgando sobre mi potro salvaje que se desboca y mi madre me toma sobre sus brazos y me salva, porque: ¡Madre, solo hay una!
    La maestra vuelve y dice:
    María léame el tema de su composición.
    A lo que María responde:
    Las olas en la playa estaban agitadas y me hundí en sus profundidades, de repente la mano salvadora de mi madre me llevó a superficie, porque: ¡Madre solo hay una!
    A ver Jaimito, dígame su composición.
    Ibamos mi madre y yo por el seco desierto cuando atisbamos unas carpas de un campamento árabe, sedientos nos acercamos a una de las tiendas y entramos. En ella había una nevera la cual abrí y ví una coca cola que quedaba en el fondo y dije:
    ¡Te embromaste madre, solo hay una!
  10. Una devota pareja de novios se va a casar, pero tienen un accidente de coche y se matan. Al llegar al cielo le preguntan a San Pedro si es posible casarse allí, y San Pedro les dice que si.
    Al cabo de cien años de espera, se casan con una ceremonia simple , sencilla.
    Al cabo de veinte años, va este matrimonio y le dice a San Pedro:
    - Veras, Pedro, es que nosotros nos queríamos casar pensando que íbamos a ser eternamente felices, pero ahora estamos convencidos de que tenemos incompatibilidades irreconciliables. ¿ Sería posible que nos divorciásemos ?
    - Pero ¿ qué dicen ? Me costó 100 años conseguir un cura para que los casase , imagínense lo que costará conseguir un abogado...
  11. La Historia de un Feo.
    Voy a contarles mi historia, no es una historia de amor ni tiene un final
    feliz, pero es la única que tengo por haber nacido así, feo, muy feo.
    Cuando nací, el doctor fue a la sala de espera y le dijo a mi padre, "hicimos lo
    que pudimos, pero salió".
    Mi mamá no sabía si quedarse conmigo o con la placenta.
    Como era prematuro me metieron en una incubadora, con vidrios polarizados.
    Mi madre nunca me dio el pecho porque decía que sólo me quería como amigo. Así que en vez de darme el pecho, me daba la espalda.
    Es por eso que debo haber quedado petiso, tan petiso que en lugar de ser enano, soy profundo. De chico iba por los cuarteles para que me gritaran:
    ¡Alto! ¡Alto!
    Yo siempre fui muy peludo. A mi madre siempre le preguntaban:
    Señora, a su hijo, ¿Lo parió o lo tejió?
    Mi padre llevaba en su cartera la foto del niño que ya venía en la cartera
    cuando la compró.
    Una vez me perdí, le pregunté al policía si creía que íbamos a encontrar a mis
    padres y me contesto:
    No lo sé, hay un montón de lugares donde se pudieron haber escondido.
    Y para colmo era muy flaco, tan flaco que un día metí los dedos en el enchufe y
    la electricidad erró la patada.
    Era realmente flaco, para hacer sombra tenía que pasar dos veces por el mismo
    lugar.
    Pero mi problema no era ser tan flaco sino ser FEO.
    Mis padres tenían que atarme un trozo de carne al cuello para que el perro jugara conmigo.
    Sí amigos, yo soy FEO, tan FEO que una vez me atropelló un auto y quedé mejor.
    Cuando me secuestraron, los secuestradores mandaron un dedo mío a mis padres
    para pedir recompensa. Mi padre les contestó que quería más pruebas.
    Yo creo que no pagaron el rescate porque en casa éramos muy pobres, pero eso sí, a pesar de nuestra situación económica, somos muy honrados. Mi padre era tan honrado que un día encontró trabajo, y lo devolvió.
    Por eso tuve que trabajar desde chico. Trabajé en una tienda de animales y la gente no paraba de preguntarme cuánto costaba yo.
    Un día llamó una chica a mi casa diciéndome, "Ven a mi casa que no hay nadie", cuando llegué no había nadie.
    El psiquiatra me dijo un día que yo estaba loco. Yo le dije que quería escuchar una segunda opinión. De acuerdo, además de loco es usted muy feo, me dijo.
    Una vez cuando me iba a suicidar tirándome desde la azotea de un edificio de 50
    pisos, mandaron a un cura a darme unas palabras de aliento. Sus palabras fueron:
    ¡En sus marcas, listos!
    El último deseo de mi padre antes de morir era que me sentara en sus piernas. Lo habían condenado a la silla eléctrica.
  12. Llegan 2 monjas montadas en un moto pasando una curva y da la caualidad de que estabn 2 policias.
    Los policias(por hacer la gracia)decidieron pararlas:
    -Alto, dice uno de los dos policias.
    y entonces se detuvieron las monjas.Y dicen los policias:
    -La documentacion de la moto por favor.
    Llegan los policias y dicen:-Pues esta todo bien y dicen las monjas:
    -Esque ibamos con Dios y dicen los policias:
    -Multaa por ir 3 en la motoo^^
  13. Nos encontrábamos, mi esposo, mi hijo de 8 años, y yo decidiendo a dónde íbamos a cenar. Mi esposo me sugieró ir al "Conejito", entonces el niño pregunta:
    ¿Qué tipo de comida sirven en ese restauran?
    Y mi esposo, que tenía un carácter fácilmente irritable, le contesta:
    ¿Qué crees tú? Si el restauran se llama "El conejito" es porque venden conejo, ¿o no? Entonces, le digo yo, mejor vamos al "Cochinito".
    Vuelve el niño a preguntar:
    ¿Qué sirven en ese restauran?
    Mi esposo un poco irritado, le contesta:
    Si usaras un poco el sentido común, no harías tantas preguntas tontas.
    De momento recuerdo que me habían recomendado un restauran llamado "El Gato Tuerto", y le digo a mi esposo:
    Mejor, vamos al "Gato Tuerto".
    El niño respondió:
    ¡Oh no, pero ese gato tuerto se lo comerán ustedes!
  14. Venía todos los días el Papa a ver a Miguel Ángel cuando estaba pintando la capilla Sixtina y le preguntaba:
    Miguel Ángel, ¿Cuándo vas a terminar la obra?
    Cuando termine padre, respondía Miguel Ángel. Y pasaron largos meses hasta que Miguel Ángel estaba ya a punto de terminar de pintar y apareció de pronto un ayudante del Papa que le dijo:
    ¡Oye Miguel Ángel, bájate de ahí!
    El Papa dijo que mañana íbamos a empapelar.
  15. Un hombre va por la carretera conduciendo y de repente lo detiene la policía:
    Buenos días Señor, lo hemos estado vigilando desde que pasó el último pueblo, y hemos observado que respeta todas las normas, se detiene en todos los semáforos, y conduce correctamente. Tráfico ha puesto un premio al mejor conductor y se lo vamos a dar a usted.
    No, pero si yo no tengo licencia de conducir, dice el conductor.
    A lo que responde su mujer:
    No le haga caso, que está bebido.
    Y la suegra comenta:
    No, si ya sabía yo que con un coche robado, no íbamos a llegar muy lejos.



chistes de ibamos

Contar chistes de ibamos es una parte importantísima de cualquier conversación o reunión social. Los chistes, llenos de humor y diversión, tienen la capacidad de liberar tensiones y crear un ambiente relajado y alegre. Pueden contarse en cualquier situación, siempre y cuando sea apropiado y no ofenda a nadie. Contar chistes puede ser especialmente efectivo para romper el hielo al inicio de un evento social, hacer reír a los demás en medio de una conversación o simplemente alegrar el día de alguien que puede necesitarlo. Sin embargo, es esencial recordar que el sentido del humor puede variar de una persona a otra, y lo que para uno puede ser gracioso, para otro puede no serlo.