Chistes de Jorgito

Estos son los 5 chistes de jorgito y más graciosos bromas sobre jorgito que matan de risa. Lea chistes acerca jorgito que sean buenos chistes para niños y amigos en español.


Chistes de jorgito para niños y niñas cortos y graciosos

¿Cuál es un buen chiste sobre jorgito para hacer reír a la gente? Mira esta lista de historias divertidas que seguramente harán sonreír a todos.

  1. Jorgito, ¿Vos no rezás antes de comer?
    No señorita, mi mamá cocina muy bien.
  2. Los papás de Jorgito estaban muy preocupados porque tenían que contarle a su hijo que iba a tener un hermanito, y no sabían cómo enfrentar el tema. En eso el papá se decide y dice:
    Jorgito, ven, te quiero contar que vas a tener un hermanito.
    Y luego Jorgito dijo:
    Yo no lo creo papá.
    Y el papá dijo:
    ¿Por qué no?
    Y dice Jorgito:
    ¡Es que en la mañana agarré a apedradas a una cigüeña!
  3. La maestra le pregunta a Jorgito:
    ¿Por qué llegas tarde?

    Ay maestra, es que venía en mi caballo y que se sienta y ya no se quiso parar.
    Bueno, ¿Y tu Pedrito por qué llegas tarde?
    Ay maestra, es que venía en mi caballo y que se sienta y ya no se quiso parar.
    Bien, ¿Y tu Pepito por qué llegas tarde? ¡Tú no tienes caballo!
    Ay maestra, pues con tanto caballo sentado no podía pasar.
  4. En la escuela, la maestra les pide a los alumnos que traigan un objeto relacionado con la medicina.
    Al día siguiente Jorgito dice:
    -Maestra, yo traje unas vendas!
    -Muy bien Jorgito, quien te las dio?
    -Mi mamá
    -¿Y que te dijo?
    -Que sirven para curar heridas.
    -Perfecto. A ver Jaimito, tu que trajiste?
    -Un respirador artificial.
    -Que bueno!, quien te lo dio?
    -Mi abuelito.
    -Y que te dijo?
    -Me ahogo hijo de p...!
  5. Una comadre a otra:
    Figúrate que ayer Jorgito voló en avión.

    ¡Que bueno!
    No tanto, porque se le cayó el avión en el aire.
    ¡Que malo!
    No tanto, porque tenía paracaídas.
    ¡Que bueno!
    No tanto, porque el paracaídas no abrió.
    ¡Que malo!
    No tanto, porque abajo había una carreta con mucha paja.
    ¡Qué bueno!
    No tanto, porque en la paja había un tridente.
    ¡Qué malo!
    No tanto, porque tampoco cayó en la carreta.