Chistes de Nacho

Chistes de nacho para niños y niñas cortos y graciosos

¿Cuál es un buen chiste sobre nacho para hacer reír a la gente? Mira esta lista de historias divertidas que seguramente harán sonreír a todos.

1. mama otra vez me hecharon guacamole. -ay nacho yo ya le dije
2. Pregunta el profesor a Nacho:
   Dime algo del Quijote.
   El alumno, un poco nervioso, le dice a su compañero:
   Sóplame, que no sé nada.
   Y escucha:
   En un lugar de la mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme...
   Por favor, acuérdate pronto, que me suspenden.
3. Íbamos yo y Nacho.
   No hijo, íbamos Nacho y yo.
   ¿Cómo? ¿entonces yo no iba?
4. Queso por la cabeza - Mamá, mamá, en la escuela me echan queso amarillo en la cabeza
   - Cállate Nacho y ¡deja de llorar ya!
5. "¡Papá, papá!"
   "¿Que pasa, hijo?"
   "¿Por qué todo el rato me tiras guacamole en la cabeza?"
   "Ya basta, Nacho."
6. Era un niño que llega corriendo a su casa y le dice a su Mamá:
   -Mamá, Mamá en la escuela me tiran queso.
   y su Mamá le responde:
   -Ya cállate nacho-.
7. mamá en la escuela siempre ke llego los compañeros me tiran queso...
   mamá en la escuela siempre ke llego los compañeros me tiran queso...
   mamaaaaa....
   AY YA CÁLLATE NACHO!!!
8. Presentador: Demos paso al concurso mas esperado de año.
   Primer concursante: Nacho Vidal 30cm y toda la gente bien...!
   Segundo: Es un moro 40cm y todos bien este casi..
   Tercero: Viene de Ucrania 50cm y toda la gente este gana, este gana y el ultimo concursante: Viene de Egipto demosle paso...
   Viendo que no llegava dicen vamos a darle 3 segundos para que venga o si no descalificado
   1
   2
   ...
   y suena la puerta toctoc y se abre y aparecen un puñado de Egipcios con una polla entre los brazos y dicen Mohama no viene hoy, mohama vendra mañana...

Contar chistes de nacho es una parte importantísima de cualquier conversación o reunión social. Los chistes, llenos de humor y diversión, tienen la capacidad de liberar tensiones y crear un ambiente relajado y alegre. Pueden contarse en cualquier situación, siempre y cuando sea apropiado y no ofenda a nadie. Contar chistes puede ser especialmente efectivo para romper el hielo al inicio de un evento social, hacer reír a los demás en medio de una conversación o simplemente alegrar el día de alguien que puede necesitarlo. Sin embargo, es esencial recordar que el sentido del humor puede variar de una persona a otra, y lo que para uno puede ser gracioso, para otro puede no serlo.