Chistes de Okay

Estos son los 15 chistes de okay y más graciosos bromas sobre okay que matan de risa. Lea chistes acerca okay que sean buenos chistes para niños y amigos en español.


Chistes de okay para niños y niñas cortos y graciosos

¿Cuál es un buen chiste sobre okay para hacer reír a la gente? Mira esta lista de historias divertidas que seguramente harán sonreír a todos.

  1. Un hombre llama a un policía y dice:
    Señor policía, yo quiero hacer una denuncia.

    Okay, dígame qué pasó.
    Yo estaba aquí tranquilo, sentado, comiéndome un pan y pasó un ladrón corriendo y me robó el pan.
    Y dice el policía:
    ¿Y estaba solo o con mantequilla?
  2. Habían 2 presos en en una celda, uno le dice al otro:
    Tengo una mala y una buena noticia.

    Y el otro le dijo:
    Okay, ¿cuál es la mala?
    La mala es que uno de nosotros se va a morir.
    Y el otro asustado le pregunta:
    ¿Y la buena?
    Es que yo no voy a morir.
  3. Un señor común y silvestre camina por la calle y ve a otro señor y le
    pregunta:
    -No a visto a un policia aca en 2 o 3 cuadras.
    -No, no he visto.
    -Okay, gracias
    -Bueno, arriba las manos.
  4. Llega un vecino al parque y le dice a otro:
    ¿Dónde estabas?

    El otro pregunta:
    ¿Por qué?
    Es que te llamé por teléfono, y te dejé un mensaje muy importante.
    Ah, okay, te dejo, voy a escucharlo.
  5. Se encuentran dos amigos en un bar y uno le dice al otro:
    Vamos a hacer un negocio, ¿Cuánto me das si te vendo a mi suegra?
    El otro responde:
    Por tu suegra, ni un centavo.
    El otro responde:
    Okay, trato hecho.
  6. Habían dos locos en un manicomio, uno le dice al otro:
    ¡Escapemosnos!

    Y el otro le contesta:
    Okay.
    ¿Pero cómo nos escapamos para que los guadias no nos vean?
    Entonces el otro loco le dice:
    Ya sé, disfracemonos de dulces.
    Cuando iban saliendo, uno de los guardias les dice:
    Oigan, pero ustedes son dementes.
    Entonces uno de los locos le dice:
    Un momento señor, yo soy de mente, él es de chequelete.
  7. Habian dos personas en un bosque. De repente uno de ellos se cae al suelo. El amigo llama para pedir auxilio. Cuando le contestan la persona le dice, "Hola, ¿en que lepuedo ayudar?"
    "Es que mi amigo parece estar muerto..."
    "Primero, ¡asegurate de que este muerto!"
    De repente deja la llamda en espera.Pasan tres minutos. "Okay, ahora si. Ahora que ya esta muerto, ¿que hago?"
  8. Dos borrachos le preguntan al barman dónde queda el baño, el barman le dice:
    Por el pasillo doblan a mano derecha, bajan dos escalones y ahí están los baños.
    Hip, okay gracias.
    Cuando van por el pasillo uno le dice al otro:
    Oye, ¿Era pa' la derecha o pa' la izquierda?
    El barman dijo pa' la izquierda.
    Pero para el lado izquierdo estaban reparando un elevador y se caen por el roto y se dan tremendo cantazo y uno se levanta bien adolorido y le dice al otro:
    Yo no sé tu, pero yo me voy a orinar aquí, yo no voy a bajar el otro escalón.
  9. Este era un amigo al que no le gustaba gastar dinero, va al aeropuerto a que el piloto le dé un paseo y le pregunta que cuánto le va a cobrar por llevarlo a él y a su esposa a dar una vuelta. El piloto le dice que 50,000 pesos.
    Pero, ¿Cómo? ¡Es mucho dinero! Y el piloto le ve y le dice:
    Bueno entonces, vamos hacer un trato, yo le doy una vuelta por toda la ciudad, si usted no grita arriba, no me paga.
    Okay, ya nos estamos entendiendo.
    Y así arranca el avión y se sube el señor y su esposa, y el piloto que era acróbata empieza a dar vueltas y vueltas, hasta que aterriza.
    Y le dice al señor:
    Bueno, ni modo perdí, usted no gritó.
    Pues, si no grité ni cuando se cayó mi señora.
  10. Era un atlante que estaba de visita en Mexico, pero se tenía que ir a Atlantilandia. Entonces habla al aeropuerto y suena el teléfono y contesta la recepcionista:
    Bueno, AeroMexico a sus ordenes.
    Bueno, quisiera saber, cuánto toma un vuelo de Mexico a Atlantilandia.
    Un minuto, le dice la recepcionista al ver que tenía otro llamado.
    Okay, gracias, responde el atlante, y corta la llamada.
  11. Llega un campesino a un bar con una radio bajo el brazo ofreciéndola en venta. En una mesa cercana hay varios citadinos quienes al verlo humilde se proponen quitarle la radio sin pagarle un centavo. Uno de los citadinos le comenta a los otros:
    Les aseguro que con unas cervezas encima, ese campesino terminará rebajando el costo de la radio hasta casi nada.
    Por lo que lo invitan a sentarse con ellos. Entonces, pregunta el citadino:
    ¿En cuánto nos vendes tu radio?
    En 30 dólares, responde de manera ingenua.
    Okay, dice el citadino, vamos a tomarnos unas cervezas y luego hablamos.
    Al cabo de un rato ya se han tomado varias cervezas cada uno y el citadino vuelve a preguntar:
    Y entonces, ¿En cuánto la vendes?
    Bueno, deme 10 dólares, responde el campesino.
    Me parece mejor, dice el citadino.
    ¡Vamos, te invito a otras cervezas!
    Luego de un buen rato le pregunta nuevamente al campesino,
    Y ahora, ¿En cuánto me la vendes?
    Deme 5 dólares para poder irme a mi casa.
    El citadino, viendo la posibilidad de quedarse con la radio, decide continuar con la ronda de cervezas y luego de otro buen rato insiste:
    Y ahora campesino, ¿En cuánto me lo vendes?
    A lo que el campesino responde:
    Le voy a decir la verdad, yo quería vender la radio para beber cerveza pero, como ya estoy borracho he decidido no venderla e irme ya a mi casa.
  12. Llega un tipo con el amigo:
    Oye, fíjate que tengo unas amigas que quieren divertirse un rato este fin de semana, y necesito que me prestes tu departamento para impresionarlas.
    Okay, no hay problema, mira te dejo las llaves, total este fin de semana me voy a ver a mis padres, ¿Y cuántas son?
    No compa, son 3, a ver como le hago.
    Mira, tengo unas pastillas que me recomendaron para estos casos, pero con cuidado solo agarras la mitad de una.
    Y llega el fin de semana y está esperando a las chavas, recuerda el consejo de su amigo y ve el frasco de las pastillas y se queda:
    Pero son tres amigas, mejor me tomo 1 completa, bueno otra.
    Ya el lunes el dueño del departamento llega, abre la puerta y ve el sofá destrozado, la mesa de cristal hecha pedacitos, los floreros tirados, la alfombra desgarrada. Pasa al cuarto y ve sabanas rotas, ropa en trozos, la cama con los resortes fuera, y en un rincón ve a su amigo todo tembloroso, y le pregunta:
    ¿Qué pasó?
    ¡No llegaron!
  13. Una pareja de esposos estaba cenando en un restaurante, cuando observaron que entró un amigo de ambos acompañado de una desconocida.
    La señora le comentó a su esposo:
    Ese que entró es Juan, pero esa no es su esposa.
    No, es una amante que él tiene, dijo el hombre calmadamente.
    La mujer comenzó a criticar la actuación de su amigo, y el esposo la paró en seco diciéndole:
    No te metas en esos asuntos, deja que los otros vivan su vida.
    Los esposos siguen cenando, cuando se acerca a ellos una chica guapísima que le dice al marido:
    Oye, me dejaste esperando ayer.
    Sí, se me presentó un problema, pero yo paso por tu casa hoy.
    Okay, nos vemos, dice la chica, retirándose de la mesa ante el asombro de la esposa, quien le preguntó en seguida a su marido:
    Y ésa, ¿quién es?
    Esa es mi amante, le aclaró el hombre.
    La mujer se puso como el diablo, y comenzó a decirle improperios al marido, pidiéndole hasta el divorcio.
    No hay problema, yo te doy el divorcio. Pero recuerda que la casa, el auto y el negocio están a mi nombre. También vete olvidando de los viajes a Europa y de las tarjetas de crédito, tus spa, el terapeuta, las compras en N.Y., la casa de playa, tu BMW, el chofer y la pensión de tu mamá.
    La mujer se calla, y luego de analizar la situación, le dice al esposo:
    La amante de nosotros es más bonita que la de Juan, ¿no?
  14. Reúnen a todos los soldados en el patio del cuartel y forman una línea, y el sargento dice:
    El que tenga una navaja, dé un paso al frente.
    Y un soldado dijo:
    Yo tengo una, mi sargento.
    Y el sargento dice:
    Okay, usted se va a Hawaii por una semana, y todos los gastos pagados.
    Al siguiente día, el sargento vuelve a preguntar:
    El que tenga una navaja, dé un paso al frente.
    Y todos dan un paso al frente y el sargento les dice:
    ¡Okay, hoy, todos a pelar papas!
  15. Se trata de 4 hombres que iban a subir un piano al piso 10.
    Ellos estaban muy cansados y uno de ellos dijo:
    Que vaya alguien a ver cuántos pisos nos faltan.
    El otro le dice:
    Okay, voy yo.
    El tipo sube y llega hasta el piso 10. Bueno, si subí 6 pisos es porque estamos en el piso 4. El tipo baja y le dice a sus compañeros:
    Les tengo dos malas noticias.
    Entonces, uno de los hombres le dice:
    Dinos una y la otra la dices cuando lleguemos.
    Okay, nos faltan 6 pisos para llegar.
    Los hombres ya bien cansados llegaron al piso 10 y uno le pregunta al otro:
    ¿Y cuál era la otra mala noticia?
    El tipo le contesta:
    Este no era el edificio.



chistes de okay

Contar chistes de okay es una parte importantísima de cualquier conversación o reunión social. Los chistes, llenos de humor y diversión, tienen la capacidad de liberar tensiones y crear un ambiente relajado y alegre. Pueden contarse en cualquier situación, siempre y cuando sea apropiado y no ofenda a nadie. Contar chistes puede ser especialmente efectivo para romper el hielo al inicio de un evento social, hacer reír a los demás en medio de una conversación o simplemente alegrar el día de alguien que puede necesitarlo. Sin embargo, es esencial recordar que el sentido del humor puede variar de una persona a otra, y lo que para uno puede ser gracioso, para otro puede no serlo.