Chistes de Padrecito

Estos son los 9 chistes de padrecito y más graciosos bromas sobre padrecito que matan de risa. Lea chistes acerca padrecito que sean buenos chistes para niños y amigos en español.


Chistes de padrecito para niños y niñas cortos y graciosos

¿Cuál es un buen chiste sobre padrecito para hacer reír a la gente? Mira esta lista de historias divertidas que seguramente harán sonreír a todos.

  1. Bautizo fuera de lo común En el bautizo de un bebe en Galicia, el cura replica:
    - NO, No, noo hijos...Que no podéis ponerle Batman al niño!
    - Bueno padrecito entonces...Superman!
    - Tampoco, Caramba! deben ponerle un nombre de pila......
    - Ya esta!.... entonces se llamara, DURACELL !!!!
  2. Un señor se acerca a un padrecito y le dice:
    - Padre ¿Es verdad que usted aparta a las mujeres del mal camino?
    - Si, hijo.
    - Ah! Pues apárteme 2 para el sábado.
  3. Este era un padrecito que en misa dice:
    Hermanos, en este pueblo se ha perdido la fe.

    Y un borrachito grita:
    ¡Nadie sale de aquí hasta que se encuentre!
  4. Este es un borrachito que va por la calle tarde en la noche, y viene por la calle también el padre Venancio y el borrachito le pregunta:
    ¿Cómo está?, padre Venancio.
    El padre le dice muy enojado:
    Borracho como siempre, ¿no?
    El borrachito le contesta:
    Ah pues padrecito, ya somos dos.
  5. En el bautizo de un niño el cura muy disconforme le dice a los padres:
    - ¡NO, NO, NOOO hijos.
    ..No pueden ponerle Batman al niño!
    - Bueno padrecito, entonces... ¿Superman?
    - Tampoco, ¡caramba! Deben ponerle un nombre de pila.
    - Ya está. Entonces se llamará, Duracel.
  6. El niño y el cura.
    Cierto día un niño huérfano estaba llorando en la puerta de una parroquia, al rato sale el cura y le pregunta:
    Hijo mío, ¿Por qué lloras?
    El niño entre lagrimas le dice:
    Es que acabo de perder un dólar.
    Y sigue llorando...
    Ya, ya no llores, le dice el cura, te voy a regalar un dólar.
    El niño coge el dólar y lo mete a su bolsillo. El cura entra nuevamente a la parroquia para tener la misa de costumbre y escucha un llanto de niño, el cura sale enfurecido y encuentra al mismo niño llorando y le dice:
    ¿Y ahora por qué lloras?
    Y el niño le responde:
    Padrecito, si no hubiera perdido mi dólar ahora tendría dos.
  7. El padre Anselmo invita a la anciana organista de la parroquia, a que practique los últimos arreglos musicales que tiene para la semana Mayor, directamente en la iglesia, en su órgano musical.
    Cuando el clérigo decide escuchar los ensayos, va y se sienta junto a la organista, y se dispone a disfrutar la música de la talentosa anciana, pero de pronto observa sobre el órgano, ¡una pequeña pecera de cristal que no tiene peces! en su lugar ¡hay un "condón" que flota sobre el agua! El cura mira a la organista extrañado, pero ésta no se da por enterada de la interrogación implícita que él tiene en su mirada. Sin poderlo evitar más el cura pregunta:
    -¿Que es eso que flota en la pecera?
    -Ah! sí padrecito: es que un día encontré en la calle un pequeño sobre plástico muy curioso, lo levante y leí que decía:
    "Consérvelo en un lugar fresco."
    "Colóquelo sobre el órgano para evitar enfermedades contagiosas."
    -Y desde que lo estoy haciendo, ni un resfriado me ha dado!
  8. Esta era una vez un padrecito que estaba dando un sermón en una cabaña, en eso un comienza a temblar, el padrecito dice:
    El ave María.
    La gente comienza a rezar, ave María Purísima, el terremoto sigue, entonces el padrecito dice:
    El rosario.
    Entonces la gente comienza otra vez a rezar, pero en eso mira hacia arriba y ve que unas tablas se van a derrumbar, y dice:
    Las tablas.
    Y la gente dice:
    Uno por uno, uno, uno por dos, dos...
  9. Un hombre va a la iglesia a confesar sus pecados. Muy arrepentido le dice al cura:
    -Ay padrecito... me robé una gallina!
    -Hijo, hijo... rezá 3 padrenuestros y devolvé ese animal a su dueño.
    -No puiedo padre... me la comí.
    -Oh! a ver... entonces que sean 6 y ofrecé pagársela.
    -Este... padre... ni me acuerdo de donde la afané... estaba muy borracho.
    El cura, ya enojado le indica:
    -Rezate un rosario completo. Agarrá la plata que te habría salido la gallina y se la das a la primera persona que cruces apenas salis de acá.
    El hombre acata la penitencia, se va al fondo y reza el rosario. Cuando sale, dispuesto a cumplir con el resto de la penitencia se encuentra a una chica en la esquina y estirando la mano con $ 5 le dice: Tenga señorita.
    -No querido... (dice la chica) son $ 20
    -Pero el cura me dijo
    -Si, pero el cura es cliente de años.



chistes de padrecito

Contar chistes de padrecito es una parte importantísima de cualquier conversación o reunión social. Los chistes, llenos de humor y diversión, tienen la capacidad de liberar tensiones y crear un ambiente relajado y alegre. Pueden contarse en cualquier situación, siempre y cuando sea apropiado y no ofenda a nadie. Contar chistes puede ser especialmente efectivo para romper el hielo al inicio de un evento social, hacer reír a los demás en medio de una conversación o simplemente alegrar el día de alguien que puede necesitarlo. Sin embargo, es esencial recordar que el sentido del humor puede variar de una persona a otra, y lo que para uno puede ser gracioso, para otro puede no serlo.