Chistes de Ponle
Estos son los 9 chistes de ponle y más graciosos bromas sobre ponle que matan de risa. Lea chistes acerca ponle que sean buenos chistes para niños y amigos en español.
Chistes de ponle para niños y niñas cortos y graciosos
¿Cuál es un buen chiste sobre ponle para hacer reír a la gente? Mira esta lista de historias divertidas que seguramente harán sonreír a todos.
- Sacandose la ropa Una Mujer a su marido:
- Desabrocha mi blusa y déjala sobre la mesa.
- Sí
- Ahora el sostén y ponlo en la cama.
- A tus ordenes
- Deja mi falda en la silla
- Claro
- Ahora mis pantis en el armario
- Ya está.
- ¡Y que sea la última vez que te pones mi ropa! - Oye Manolo, se ha cortado la luz.
Pues, ponle una curita. - Dos atlantes conversan:
-Oye, Pepe se ha cortado la luz
-Pues, ponle una curita. - Los casados al desnudo En el cuarto, esta una pareja de casados,
y ella le dice a el:
-desabrocha mi blusa y dejala en la cama.
-si mi amor......
-ahora el brasier y ponlo en la silla.
-de inmediato mi vida.-.deja mi falda en el ropero.
-claro cariño.
-mis pantis tiralas al suelo.
-listo corazon
-¡y que sea la ultima vez que te pones mi ropa! - Una mujer le está friendo unos huevos para el desayuno a su marido, cuando de pronto, este entra en la cocina y dice:
- ¡Cuidado, cuidadooo!!
¡Ponle un poco mas de aceite, por Diosss!!
¡¡¡Estás cocinando demasiados al mismo tiempo!!!
¡Demasiados!
¡Dales la vuelta!!
¡Dales la vuelta ahora!!!
¡Necesitamos más aceite, por Dios!!
¿Dónde vamos a conseguir mas aceite?!
¡Se van a pegaarr!!!!!
¡Cuidadooo, cuidadooo, dije cuidadoooooo!!!!
¡Nunca me haces caso cuando cocinas, nunca!!!
¡Cuidado, dales la vuelta!!!
¡Rápido!!!
¡Estás loca!!! ¿Perdiste la cabeza?
¡No te olvides de echarles saaalll!!!!
¡Sabes que siempre te olvidas de la sal, usa la sal, usa la maldita saalll!
La mujer lo mira con asombro:
- ¿Qué te pasa? ¿Crees que no puedo freír un par de huevos?
El marido sonríe y contesta calmadamente:
- Solo quería mostrarte lo que se siente cuando voy conduciendo contigo en el auto. - Friendo unos huevos Una mujer está friendo unos huevos para el desayuno a su esposo, cuando de repente, este entra por la puerta de la cocina y le dice a su señora:
- ¡Cuidado, cuidado!!
¡Ponle más de aceite, por Dios que se te van a pegar!!
¡¡Pusiste demasiados huevos al mismo tiempo!!!
¡Demasiados!
¡Dales la vuelta o se quemaran!!
¡Dales la vuelta ya!!!
¡Échales más aceite, por Dios!!
¿Dónde hay más aceite para los huevos?!
¡Se van a pegaar , dales la vuelta!!!
¡Cuidado, cuidado, te dije que cuidadoooooo!!!
¡Nunca me haces caso cuando cocinas, nunca!!!
¡Cuidado, dales la vuelta rápido!!!
¡Rápido!!!
¡Estás loca!!! ¿Perdiste la cabeza? ¡Se van a pegar!
¡No te olvides de ponerles sal!!!!
¡Sabes que siempre te olvidas de la sal, ponle sal, pon la maldita sal!
La mujer lo mira con asombro:
- ¿Qué te pasa cabronazo? ¿Crees que no puedo freír un par de huevos?
El marido sonríe y le contesta calmadamente a su esposa:
- Solo quería enseñarte lo que se siente cuando voy conduciendo contigo en el coche!!! - Cabra camuflada Esto es un señor que va a embarcar en un barco y llevaba a su cabra. En esto que el de la aduana le dice:
- ¡La cabra no pasa!
El hombre se va, le ve un amigo y le dice:
- Pinta la cabra de negro y ponle un bozal y pensará que es un perro.
El hombre lo hace y el de la aduana le dice:
- ¡He dicho que la cabra no pasa!
Y el hombre le responde:
- ¡Sino es una cabra, que es un perro!
Y el de la aduana le dice:
- ¿Y los cuernos?
Y el hombre contesta:
- ¡Con la vida privada de mi perro no se meta! - Cuando tengas las manos embadurnadas de grasa, te comenzará a picar la nariz o el traste.
(Ley de mecánica de Tukulyto Tepyka).
Cuando necesites abrir una puerta con la única mano libre, la llave estará en el bolsillo opuesto.
(Ley de Mancus Paridus)
Da igual por donde abras la caja de un medicamento. Siempre te molestará el prospecto.
(Principio de Aspirino)
El seguro lo cubre todo. Menos lo que sucede.
(Ley de Seguros de Note Phaghan).
Cuando las cosas parecen ir mejor, es que pasaste algo por alto.
(Segundo Corolario de Laca Gamos).
Siempre que las cosas parecen fáciles es porque no atendemos todas las instrucciones.
(Principio de Atrope Llado).
Si mantienes la calma cuando todos pierden la cabeza, sin duda es que no captaste el problema.
(Axioma de Lentho Espeso).
Llegarás al teléfono justo a tiempo para oír como cuelgan.
(Principio de Ring A. Bell).
Siempre que te vayas a conectar a Internet, se producirá la llamada que habías estado esperando durante todo el día.
(Principio de Dialer).
Si solo hay dos programas que valgan la pena ver, serán a la misma hora.
(Ley de Keka Gadha)
La probabilidad de que te manches comiendo, es directamente proporcional a la necesidad que tengas de estar limpio.
(Ley de Reput A Mhadhres)
Cuando tras años de haber guardado una cosa sin usarla decides tirarla, no pasará más de una semana que la necesites de verdad.
(Ley de la Fatalidad irreversible de Keboludus Kefuistes).
El mundo se hace día a día con el esfuerzo de los inteligentes, pero son los imbéciles quienes lo disfrutan.
(Corolario de la vida misma de Nojhodas Dis Fhruta).
No te tomes tan en serio la vida, al fin y al cabo no saldrás vivo de ella.
(Teorema de la seguridad absoluta de Ponle Huevos) - En un bar con poco éxito, entra un hombre a tomarse el desayuno:
Hola, buenos días, póngame un café con leche y una magdalena, por favor.
El camarero le pone el café con leche y la magdalena, que da la casualidad que coge una del fondo del cajón que llevaba más días hecha que la monalisa, y se la pone, el hombre echa el azúcar, remueve su cafecito, abre la magdalena, la pone en el café, y la magdalena hace, sssrrrurfchhh, y se chupa todo el café con leche, el hombre asustado deja la magdalena en el plato y dice:
Camareroooo, por favor póngame otro café con leche y a la magdalena ponle lo que quiera.

Contar chistes de ponle es una parte importantísima de cualquier conversación o reunión social. Los chistes, llenos de humor y diversión, tienen la capacidad de liberar tensiones y crear un ambiente relajado y alegre. Pueden contarse en cualquier situación, siempre y cuando sea apropiado y no ofenda a nadie. Contar chistes puede ser especialmente efectivo para romper el hielo al inicio de un evento social, hacer reír a los demás en medio de una conversación o simplemente alegrar el día de alguien que puede necesitarlo. Sin embargo, es esencial recordar que el sentido del humor puede variar de una persona a otra, y lo que para uno puede ser gracioso, para otro puede no serlo.