A continuación se muestra nuestra colección de anécdotas divertidas y chistes sobre Prisioneros. Hay algunos chistes de prisioneros cortos que nadie conoce (para contarle a tus amigos) y para hacerte reír a carcajadas.
Tómese su tiempo para leer esos juegos de palabras y acertijos en los que hace una pregunta con respuestas, o donde la configuración es el remate. Esperamos que encuentres estos juegos de palabras con prisioneros lo suficientemente divertidos como para contarlos y hacer reír a la gente.
General, se nos escapó el prisionero.
El general bien enojado y furioso le pega al escritorio con su mano y dice:
¡Cómo que se les escapó! ¡Que no les había dicho que vigilaran todas las salidas!
El oficial dice:
Sí general, es que se nos escapó por una entrada.
- Madre, me quiero suicidar...
- Pero hijo, que te pasa ¿por qué dices eso?
- Es que cuando estuve como prisionero de la guerra, un africano me violó..
- Tranquilo hijo, nadie lo sabe, la vida continúa igual...
- Si, la vida continúa... yo aquí y mi africano tan lejos...
EN PRISION: Tu pasas la mayor parte del tiempo en una celda de 8x10.
EN EL TRABAJO: Tu pasas la mayoría de tu tiempo en un cubíc**... de 6x8.
EN PRISION: Tu tienes tres comidas al día.
EN EL TRABAJO: Tu tienes un descanso para 1 comida y tienes que pagar por ella.
EN PRISION: Tu obtienes menos días por buen comportamiento.
EN EL TRABAJO: Tu eres recompensado por buen comportamiento con mas trabajo.
EN PRISION: Un guardia cierra y abre las puertas por ti.
EN EL TRABAJO: Tu debes llevar alrededor una tarjeta de seguridad y cierras y abres todas las puertas tu mismo.
EN PRISION: Tu puedes mirar la TV y jugar juegos.
EN EL TRABAJO: Tu eres despedido por mirar TV y jugar juegos.
EN PRISION: Tu tienes tu propio baño.
EN EL TRABAJO: Tu tienes que compartir.
EN PRISION: Ellos permiten que tu familia y amigos te visiten.
EN EL TRABAJO: Tu no puedes incluso hablarle a tu familia y amigos.
EN PRISION: Todos los gastos son pagados por los que pagan impuestos sin que se requiera trabajar.
EN EL TRABAJO: Tu pagas todos los gastos para ir a trabajar y entonces ellos restan impuestos de tu salario para pagar por carceles para prisioneros.
EN PRISION: Hay guardias que son a menudo sádicos.
EN EL TRABAJO: Ellos son llamados supervisores.
EN PRISION: Tu tienes tiempo ilimitado para leer los chistes por e-mail
EN EL TRABAJO: Tú eres despedido si te atrapan mirando chistes.
Llama a los funcionarios del Ayuntamiento y al jefe de la policía local y les ordena enviar un telegrama a Pekín declarando la guerra.
Se recibe el telegrama, y el presidente de China pregunta a sus generales:
Lepe nos declara la guerra...., ¿dónde está Lepe....
Después de 4 horas localizando al belicoso país, encuentran que Lepe es un pequeño pueblo, semejante a la cagada de una mosca en el mapamundi, ubicada al Sur de España.
Analizando el riesgo de semejante conflicto bélico, las autoridades militares chinas deciden aceptar la guerra.
El presidente llama a su secretaria y le ordena:
- Contéstele al gobierno local de Lepe y dígale que aceptamos guerra, y que además, nos digan con que potencial militar cuentan.
Se recibe el telegrama en Lepe. Después de leerlo, el alcalde le dice a un funcionario del Ayuntamiento:
- Vamos a contestarle a esa gente: Contamos con 20 policías locales, 15 bomberos, 130 pistolas, diez escopetas de caza, 5 coches de policía, tres gabarras y dos lanchas neumáticas con motor fuera borda; además, la Defensa Civil la componemos: el alcalde, 10 funcionarios y los jubilados de los hogares del pensionista; envíeselo y que nos digan ellos con que cuentan para hacernos frente.
Respuesta de China:
- Contamos con 27 millones de soldados, 120 mil oficiales, 24 generales y 6 Almirantes, 200 mil cañones, 25 mil tanques, 36 mil aviones, 150 submarinos, 30 portaaviones, 18 buques cisternas todo dirigido por satélite.
Se recibe el telegrama en Lepe.
Respuesta del Alcalde:
- Lepe no acepta la guerra por no tener sitio para tantos prisioneros.
- Mi amor, yo no sé nada de esto... perdóname pero vas a tener que enseñarme.
- No te preocupes -dice el hombre frotándose las manos. Lo haremos como si fuera un juego...
- Bueno, ¿cómo se llama juego?
- El juego se llama "EL REO Y LA PRISIÓN". Tus partes íntimas serán "la prisión" y lo mío será "el reo". El juego consiste en meter al reo en la prisión y no permitir que se salga...
La pareja empieza el juego, y juegan hasta quedar exhaustos. El hombre se tiende en la cama, pero la chica se le abalanza encima diciéndole:
- Amor, ¡el reo se fugó de la prisión!
El hombre encantando con la reacción de la chica, conduce de nuevo al reo "tras las rejas". Cuando terminan, el hombre trata de tomar un merecido descanso cuando la muchacha exclama:
- Mi amor, ¡se ha fugado de nuevo!
El hombre ya casi sin fuerzas, toma al reo por el cuello y lo conduce de nuevo. Pero una vez más al terminar la chica dice:
- Mi amor... ese prisionero es un bribón, se salió otra vez...
- ¡Carajo, no más! ¡El reo no tení cadena perpétua!
Y le dice el listo al tonto:
Coge aquella lima y cuando se acueste esta gente nos ponemos a limar.
Dice el tonto:
¡Venga, vale!
Se pone el listo a limar las rejas de la cárcel y se despierta el guardia y dice:
¿Quién anda ahí?
El listo dice:
¡Miau!
Y dice el guardia:
Ah, ese es el gato de siempre.
Ahora se pone a limar el tonto y dice el guardia:
¿Quién anda ahí?
Y dice el tonto:
¡Otro gato!
Tres hombres, un catalán, un vasco y un madrileño, se perdieron en la selva y fueron capturados por unos caníbales.
El rey de los caníbales le dijo a los prisioneros que podían salvar sus vidas si lograban pasar una prueba que contenía dos partes: La primera parte de la prueba, era volver a la selva y conseguir diez unidades de una misma fruta. Entonces cada uno de los tres hombres tomó su camino a la selva para encontrar las frutas. El Vasco regresó y le dijo al rey:
- Me llamo Patxi, yo traje 10 manzanas.
El rey le explicó la segunda parte de la prueba:
- Ahora tienes que meterte por el recto cada una de las frutas. ¡Sin poner ninguna expresión en la cara, o te comemos!
La primera manzana entró, pero con la segunda, el vasco se retorció de dolor, por lo que inmediatamente lo mataron.
El catalán llegó y le mostró al rey diez cerezas. Cuando el rey le explicó la segunda parte de la prueba, el hombre pensó que sería tarea muy fácil, entonces
empezó:
1.. 2.. 3.. 4.. 5.. 6.. 7.. 8.. 9 y justo en la novena cereza, soltó una carcajada y lo mataron.
El vasco y el catalán se encontraron en el cielo, y el vasco le preguntó al otro:
- Oye Pere, ¿y usted porque soltó la carcajada, si ya casi lo había logrado?
A lo que el catalán le contesta:
- No pude evitarlo, es que vi al madrileño, llegando con PIÑAS!
"Chinos de m@#~@: les declaramos la guerra; tenemos 105 tanques, 47 aviones funcionando, 4 barcos que navegan y 5,221 soldados"
Los chinos les contestaron:
"Aceptamos la declaración; tenemos 180.000 tanques, 18.000 aviones, 7900 barcos misileros y 125 millones de soldados".
A lo que los leperos les contestaron:
"Retiramos la declaración de guerra. No tenemos cómo alimentar tantos prisioneros".
Basta pensar que hay chistes basados en la verdad que pueden derribar gobiernos, o chistes que hacen reír a las chicas. Muchos de los prisioneros los chistes y los juegos de palabras son chistes que se supone que son divertidos, pero algunos pueden ser ofensivos. Cuando los chistes van demasiado lejos, son crueles o racistas, tratamos de silenciarlos y será genial si nos das tu opinión cada vez que un chiste se vuelve intimidante e inapropiado.
Sugerimos usar solo prisioneros bromas para adultos y blagues para amigos. Algunos de los chistes obscenos y obscenos son divertidos, pero utilícelos con precaución en la vida real. Intenta recordar chistes divertidos que nunca hayas escuchado para contarles a tus amigos y te harán reír.