Chistes de Quereis

Estos son los 6 chistes de quereis y más graciosos bromas sobre quereis que matan de risa. Lea chistes acerca quereis que sean buenos chistes para niños y amigos en español.


Chistes de quereis para niños y niñas cortos y graciosos

¿Cuál es un buen chiste sobre quereis para hacer reír a la gente? Mira esta lista de historias divertidas que seguramente harán sonreír a todos.

  1. Un señor llega a un abasto y pide:
    ¿Me da un pote de veneno para matar cucarachas?

    El vendedor le pregunta:
    ¿Para llevar?
    ¡Noooo! ¡Si queréis te traigo las cucarachas!
  2. El capataz que baja a las bodegas de un barco movido por esclavos y les dice:
    Tengo dos noticias que daros, una buena y una mala, ¿Cuál queréis primero, la buena o la mala?
    Y dicen todos:
    La buena.
    Les contesta:
    Que viene el rey.
    ¿Y la mala?
    Que viene a hacer esquí acuático.
  3. Un candidato a alcalde hace una aparición en su pueblo y les dice:
    ¿Qué pide el pueblo?

    ¡Un año con dos cosechas!
    Entonces el alcalde dice:
    Pues a partir de ahora declaro el año de 24 meses.
    El mismo alcalde viendo la aceptación vuelve a preguntar:
    ¿Qué más queréis?
    ¡Un puente, un puente!
    Pero, ¿Para qué si por aquí no pasa ningún río?
    No importa, el agua ya la traeremos en pozales.
  4. Era una vez un monaguillo y un padre que van en un avión, entonces el padre le pregunta al monaguillo: ¿Hijo a que altura estamos? y este le responde a 3.000 pies padre y el padre dice me trae un vino por favor aeromoza, al rato el padre le vuelve a preguntar al monaguillo: ¿Hijo a que altura estamos? y este le responde a 6.000 pies padre y así sucesivamente va aumentando la altura y el padre sigue pidiendo vino hasta que el padre se embriaga el padre y le pregunta al monaguillo: ¿Hijo hip a que altura estamos hip? a 12.000 pies padre y el monagillo le pregunta: ¿Padre, no va a pedir otro vino? y el Padre le responde: ¿Que queréis que se entere San Pedro?
  5. Los siete enanitos están de viaje por Europa, y han llegado a Roma. Ya que andan por ahí, piden audiencia para hablar con el Papa, y se la conceden. Éstos ingresan a la sala de audiencia, encabezados por Gruñón. El Papa los saluda:
    - Queridos hermanos, ¿Queréis preguntarme algo? ¿Hay algo que os inquiete?
    Gruñón se adelanta:
    - Disculpe Santidad, queríamos saber si en Roma hay monjas enanas.
    El Papa responde sorprendido:
    - Pueees... no, en Roma no hay monjas enanas.
    Se oyen algunas risitas y murmullos entre los enanitos. Gruñón mira hacia atrás molesto, y todos callan. Vuelve a preguntar:
    - Y en Europa ¿No hay monjas enanas?
    El Papa responde nuevamente, con santa paciencia:
    - No, querido hijo, que yo sepa, en toda Europa no hay monjas enanas.
    Ahora todos los enanitos se ríen, mientras que Gruñón se va poniendo colorado:
    - ¿Y en el mundo? ¿En todo el mundo? ¿No hay monjas enanas?
    - No, no querido hijo, seguro que en todo el mundo, no hay monjas enanas.
    Los enanitos se cagan de la risa... saltan... se abalanzan unos sobre otros... se toman de las manos, y todos cantan:
    - Gruñón se tiró un pingüino... Gruñón se tiró un pingüino... Gruñón se tiró un pingüino...
  6. Secuestro a la gallega El gallego Manolo se encontraba viviendo en Argentina, y estaba pasando por serios apuros económicos, cuando decidió meterse de lleno en la galopante industria del secuestro.
    Fue al parque más cercano, se escondió detrás de un árbol y agarró al primer niño que pasó, lo llevó a su casa y escribió la siguiente nota:
    -'Que he secuestrao a vuestro hijo, si lo queréis tener vivo y de regreso con vosotros, dejad mañana detrás del árbol de ucalitus a las 7:00 de la mañana, una bolsa de supermercado con 10.000 $.
    Firmado: -'El Gallego'-.
    Dobló la nota y se la puso en el bolsón al niño, al que le dice:
    - 'Vete directo a tu casa y enseña a tus padres la nota'-.
    Al día siguiente encontró la bolsa de supermercado en el parque, según las instrucciones, con los 10.000 $ y con la siguiente nota:
    - '¡Joder; que no puedo creer que un gallego le haga ésto a otro gallego!'-.