Chistes de Ratito
Estos son los 13 chistes de ratito y más graciosos bromas sobre ratito que matan de risa. Lea chistes acerca ratito que sean buenos chistes para niños y amigos en español.
Chistes de ratito para niños y niñas cortos y graciosos
¿Cuál es un buen chiste sobre ratito para hacer reír a la gente? Mira esta lista de historias divertidas que seguramente harán sonreír a todos.
- Un niño le dice a su papá:
Papito, papito, mi hermanita ha prendido la computadora.
El papá le responde:
Déjala hijito, que tu hermanita juegue un ratito.
El niño le respode:
Está bien papá, pero como el fuego llegue a tu cuarto, es tu problema. - Una pareja de recien casados van a hacer el amor por primera vez, el hombre era extremadamente delgado y la mujer un poco entradita en carnes, como eran un poco timidos comenzaron por apagar la luz antes de desnudarse, se meten en la cama y al ratito ella exclama "Pepeeeee, enciende la luz que se ha caido el cristo de la pared".
- Van dos ratitas por la calle y pasa un murciélago por encima. Y dice una:
¿Qué es eso?
Y dice la otra:
Mi novio que es piloto. - En el consultorio el doctor le dice al marido:
Lo siento señor, pero a su esposa sólo le queda una hora de vida.
A lo que el señor responde:
No se preocupe doctor, ya la he aguantado ocho años...me puedo esperar otro ratito. - En la acera de una calle de mucho tráfico en una gran ciudad, una ancianita se dirige a un joven:
Por favor, ¿Sería usted tan amable de ayudarme a pasar al otro lado?
Sí señora, con mucho gusto, pero espere un ratito a que el semáforo se ponga verde.
Contesta la anciana:
¡Si estuviere verde, ya habría pasado yo! - Un hombre que tiene un tic nervioso que le hace guiñar un ojo, pide trabajo como vendedor en una agencia de viajes.
- Según su currículum, veo que usted está más que cualificado para este trabajo - dice el jefe de personal - pero, desgraciadamente, no podemos contratar a un vendedor que esté constantemente guiñando el ojo a los clientes.
- Pero espere - dice el hombre- si me tomo dos aspirinas dejo de guiñar el ojo.
- Muéstreme - dice el jefe de personal.
Entonces el hombre se mete la mano en el bolsillo del pantalón y saca una cantidad enorme de condones de todas formas y colores, finalmente encuentra un par de aspirinas y al ratito de tomarlas deja de guiñar el ojo.
- Es excelente que haya dejado de guiñar el ojo - dice el jefe -, pero no podemos tener vendedores que sean unos mujeriegos.
- ¿Qué quiere decir? - pregunta el hombre -, yo estoy felizmente casado.
- ¿Y cómo explica todos esos condones?, dice el jefe.
- Ah, eso ... - dice el hombre - haga usted la prueba de ir a una farmacia y pedir aspirinas guiñando el ojo? - Un conejo estaba sentado delante de una cueva escribiendo, cuando
aparece un zorro.
- Hola, conejo, que haces ?
- Estoy escribiendo una tesis doctoral sobre como los conejos comen
zorros.
- Ja, ja, pero que dices ?
- No te lo crees ? Anda, ven conmigo dentro de la cueva...
Total, que los dos entran y al cabo de un ratito sale el conejo con
la calavera del zorro y se pone a escribir. Al cabo de un rato llega un lobo.
- Hola, conejo, que haces ?
- Estoy escribiendo mi tesis doctoral sobre como los conejos comen
zorros y lobos.
- Ja, ja, que bueno, que chiste mas divertido !
- Que no te lo crees ? Anda, ven dentro de la cueva, que te voy a
enseñar algo !
Al cabo de un rato sale el conejo con una calavera de lobo, y empieza
otra vez a escribir. Despues llega un oso.
- Hola, conejo, que haces ?
- Estoy acabando de escribir mi tesis doctoral sobre como los conejos
comen zorros, lobos y osos.
- No te lo crees ni tu.
- Bueno, a que no te metes en la cueva conmigo ?
De nuevo se meten los dos en la cueva, y como era de esperar, un leon
enorme se tira encima del oso y se lo come. El conejo recoge la calavera del
oso, sale fuera y acaba su tesis.
Moraleja: Lo importante no es el contenido de tu tesis, sino tu asesor. - El novio acompaña a su novia a la casa, después de una salida.
Cuando llegan a la entrada de la casa, él, adoptando una
Posición ganadora apoya una mano en la pared y le dice: Mi amor, ¿por
qué no me das una chupadita?
¿Qué? ¿Estás loco?!
Ya pues, rapidito, no pasa nada.
No: puede aparecer alguien de mi familia o algún vecino y
reconocerme y en tremendo lío que nos metemos. Mejor quédate quieto.
Pero es un ratito nada más, la cabecita nada más; a esta hora de
la noche no viene nadie, te lo juro mi amor.
¡Te dije que no, no y no!!!.
Ya pues. Yo sé que a ti te gusta. Una chupadita nada más...
¡¡QUE NO!!!
Anda, no seas así...
En ese momento aparece sorpresivamente la hermana
de la chica, en camisón y toda despeinada. Medio dormida le dice
a su hermana:
Dice mi Papá! que se la chupes, sino, que se lo chupe yo y si
no, dice que baja él y se la chupa, pero que por favor le digas a este
reconcha su madre
¡¡¡QUE QUITE LA MANO DEL INTERCOMUNICADOR Y NOS DEJE DORMIR
CARAJO!!! - Era una vez en que dos ratitas viajaban en un automóvil que recién habían comprado, muy presumidas recorrían todo tipo de lugares y a muy alta velocidad. Ellas iban de lo mejor y se les pinchó un neumático, entonces la ratita que conducía le dice a la otra:
¿Por qué no te bajas y sacas la gata de la capota trasera?
Con espanto contesta enseguida la otra ratita:
¡Y por qué no vas tú mejor? - El novio acompaña a su novia a la casa después de una salida. Cuando llegan a la entrada, él, adoptando una posición ganadora, apoya una mano en la pared y le dice:
- Mi amor, ¿por qué no me la chupas un ratito?
-¿Aquí? ¡Tu estás loco!
- Dale, rapidito, no pasa nada ...
-¡ No!. Puede bajar alguien de mi familia a tirar la basura o algún vecino y reconocerme.
- Pero es un ratito nada más, a esta hora no viene nadie.
- Que no hombre, que si bajan a tirar la basura ...
- Dale, si a ti te gusta, una chupadita nada más tía ...
-¡ No! Que pueden bajar ....
- Dale, no seas así ....
- He dicho que no, que no y que no.
- Venga, si ahí agachada no te va a ver nadie, tonta.
-¡¡¡¡NO!!!
En ese momento aparece la hermana de la chica, en camisón, toda despeinada y le dice:
- Dice papa que ya hemos tirado la basura, así que, que se la chupes de una p**... vez y si no, que se la chupe yo, y si no, dice que baja él y se la chupa, pero, por favor, que levante la mano del puto telefonillo que son las tres de la mañana, ¡joder! - Un empresario vuelve de su oficina en la tarde y -en medio de un gran aguacero- ve a una bella mujer en la parada de colectivos, por lo que detiene su automóvil:
- Llueve a cántaros .... ¿La llevo ?
- Ah, bueno, gracias, responde ella entrando al auto.
Llegando al edificio donde ella vive, lo invita a entrar:
- ¿No quiere Ud. tomarse un cafecito, un whisky, o alguna cosita que le invite, con este frío?
- No gracias, debo llegar temprano a casa .
- Pero... ha sido usted tan gentil y amable, suba siquiera un ratito.
Él sube ante la petición de la dama, cuando entran, ella le sirve un buen coñac y luego va a su dormitorio, del que retorna arreglada y perfumada, dejando entrever un cuerpo bellísimo bajo una sugestiva bata de seda.
Beben algunos tragos, oyen música, charlan, ríen, entran en confianza, y como debía pasar se van a la cama, tienen s**... con especial entrega, y luego se duermen.
A las 6 de la mañana del día siguiente, él despierta preocupadísimo:
- Pucha madre, que bestia, me quedé dormido ... ¿Ahora qué hago?
Medita, toma el teléfono, marca el número de su casa y tan pronto le responde su mujer, grita:
- ¡Marcela, no pagues el rescate!... ¡logré escapar! - Una tía a la que le olía el choco más que a nadie en el mundo, y no podía tener relaciones porque, aunque estaba buenísima, todos los tíos salían corriendo a la hora de entrar a matar.
Está en el ginecólogo...
- Bueno, doctor... ¿qué tal las pruebas?
- Pues verá usted... Esto ni es operable, ni tiene medicación posible, ni echándose 10 botes de Rexona todos los días, ni lavándoselo con agua bendita; a usted le olerá así toda la vida, así que le recomiendo que encuentre a alguien que carezca del sentido del olfato.
- Bueno... a ver si hay suerte.
Al cabo de cuatro años, estaba cenando con un hombre, y éste le confiesa que no tiene nada de olfato. "¡Madre mía! ¡A éste sí que me lo follo", pensó ella. Total, que se van para casa y empiezan a desnudarse. El tío se dispone a practicarle el cunilingus, y al ratito le dice:
- Oye, a ti te huele el coñó un montón, ¿verdad?
- Pues... Sí... Pero.. ¿cómo lo has sabido, si no hueles?
- ¡¡c**..., asquerosa!! ¡¡Me están llorando los ojos!! - Un abogado se muere y se va al cielo, llega y toca la puerta. En eso sale San Pedro y le dice:
- ¿Tu quién eres?
- Yo soy abogado y bueno pues me han mandado al cielo. -responde al abogado. - No, no! tu no puedes entrar acá.
- ¿Pero como que no puedo entrar?, ¿tu quién eres para decirme que no puedo entrar?
- ¿Cómo?!... yo soy San pedro, el que decide si entrás o no.
- A ver, ¿dónde está tu título que dice que eres San pedro el único que puede dejar o no entrar al cielo?
- Un ratito. -le dice y se va corriendo a buscar a Jesús y le cuenta pues que en la puerta había un abogado que quería entrar al cielo y que como él no quería entonces le había pedido su título que por favor salga. Entonces sale Jesús:
- Bueno hombre al parecer tú no puedes entrar al cielo porque estamos llenos de abogados y ya... ya no pues.
- ¿Cómo que no hay sitio, tu quién eres para que no me dejes entrar?
- Yo soy Jesús el hijo de Dios y te digo que ya no puedes entrar al cielo.
- ¿Cómo que hijo de Dios? ¿cuál Dios?, haber enséñame tu partida de nacimiento, ¿dónde dice que eres el hijo de Dios?
Entonces Jesús va a buscar a Dios...
- Pa, pa... allá afuera hay un abogado que quiere entrar al cielo, primero le pidió su título a San Pedro, luego me pidió partida de nacimiento para ver si soy hijo de Dios... ¿qué hago?
- Ya, ya, ya... déjalo entrar nomás, no vaya ser que me pida partida de matrimonio...

Contar chistes de ratito es una parte importantísima de cualquier conversación o reunión social. Los chistes, llenos de humor y diversión, tienen la capacidad de liberar tensiones y crear un ambiente relajado y alegre. Pueden contarse en cualquier situación, siempre y cuando sea apropiado y no ofenda a nadie. Contar chistes puede ser especialmente efectivo para romper el hielo al inicio de un evento social, hacer reír a los demás en medio de una conversación o simplemente alegrar el día de alguien que puede necesitarlo. Sin embargo, es esencial recordar que el sentido del humor puede variar de una persona a otra, y lo que para uno puede ser gracioso, para otro puede no serlo.