Chistes de Consejo

Estos son los 32 chistes de consejo y más graciosos bromas sobre consejo que matan de risa. Lea chistes acerca consejo que sean buenos chistes para niños y amigos en español.

Tabla de contenidos


Los Mejores Chistes de Consejo

Estos son nuestros mejores frases chistosas de consejo. Diviértete con un buen bromas de consejo en español con sencillo humor de consejo y fotos para reir.

  1. Consejos entre mosquitos Esto es Papá Mosquito enseñando a su hijo Mosquitín...
    -Hijo, no estudies nunca para ser artista, acuérdate de que tu abuelo murió a causa de un aplauso...
  2. -Papá, necesito un consejo. La novia dice que necesita tiempo, que no es por mi que es por ella. ¿Qué significa?
    - Significa que eres un cornudo.
  3. Un día un señor pedía limosna y un señor que lo ve le dice:
    ¿Por qué usted no se pone a trabajar?
    Y el pobre le dijo:
    ¡Le pedí limosna no consejos!



Chistes Cortos de Consejo

Un chiste cortos de consejo breve puede contarse en casi cualquier momento o situación, puesto que no requiere de demasiado tiempo. Anécdotas cortas acerca de consejo muy bueno y tienen garantizada la risa.

  1. ¿Sabes cuál es el peor consejo en tiempos de crisis?
    -El de ministros.

Chistes de consejo muy buenos y graciosos

Los chistes de consejo para niños y para amigas muy buenos y graciosos siempre son un éxito en las fiestas. La risa está garantizada cuando se comparten estas consejo bromas divertidas.

Luego de comerse tres platos en un exquisito restaurante, el cliente llama al mozo:
Camarero, todavía me he quedado con hambre, ¿Qué me aconseja pedir?
¿Quiere un consejo sincero?
Pida la cuenta, ¡Y estoy seguro que se le pasará el apetito!

Un hombre de edad avanzada que quería conquistar a una jovencita le pide consejo a su mejor amigo:
No sé qué hacer, ya le ofrecí flores, un auto, dinero, ¡No hay forma de que caiga rendida a mis pies!
A lo que el amigo responde:
Sí, con cloroformo.

Era un atlante que quería ver una película;

como no sabe qué película ver, le pide consejo a sus amigos, que le dicen:
Anda a la tienda de videos y escoge el nombre que más te guste.
Una hora más tarde, el atlante vuelve a llamar a sus amigos.
Oigan no se ve nada en esa película.
¿Y cómo se llama?"
Limpiador de cabezales.

Un doctor y un abogado estaban asistiendo a un cóctel cuando al doctor se le aproximó un hombre quien le pidió ayuda sobre como manejar su ulcera. El doctor murmuró un consejo médico, entonces se volvió hacia el abogado y preguntó: “¿Cómo manejas la situación cuando se te pide un consejo durante un evento social?”.
“Solo envía una cuenta por ese servicio”, respondió el abogado.
A la mañana siguiente el doctor llegó a su consulta y emitió una cuenta por 50 dólares para el hombre del cóctel aproblemado por la ulcera. Esa tarde el médico recibió una cuenta por 100 dólares del abogado.

Cierto día, a mitad de una clase, un maestro de literatura se quedó profundamente dormido detrás de su escritorio. Cuando despertó, queriendo disculparse, les dijo muy serio a los alumnos:
Me remonte en sueños al tiempo de Don Quijote de la Mancha y le pedí consejo sobre los mejores libros de caballería.
Al otro día, uno de los muchachos se acomodó en su pupitre y lo venció el sueño. Al verlo, el maestro lo despertó y le pidió una explicación, a lo que el chico respondió:
Me remonté en sueños al tiempo de Don Quijote, le pregunté por usted y me dijo que no lo conocía.

El hijo del cura

Esto era un cura que en los últimos meses notó que tenia la barriga cada vez más hinchada, así que se fue al médico a pedir consejo. Una vez en el hospital los médicos vieron que eran gases, nada grave y quisieron gastarle una broma, lo anestesiaron, le sacaron los gases y le pusieron a un bebé huérfano al lado, al despertar el médico le dijo:
- Le hemos sacado de la barriga este niño.
El cura preocupado se fue para su casa y allí les dijo a sus amigos y conocidos que el bebé era un sobrino suyo que se había quedado huérfano.
Pasaron los años y el cura se hizo mayor, y ya en su lecho de muerte llamó a su sobrino:
- José, tengo que contarte una cosa muy importante antes de morir.
- No se preocupe, siempre he sospechado que usted era mi padre.
- No, no soy tu padre hijo, soy tu madre, tu padre es el Obispo!

Un empleado, le dice a su jefe que tiene mucho estrés y que se marcha a casa a descansar.


Al jefe, le dice:
- Permíteme que te de un Consejo. Yo cuando estoy estresado, le hago el amor a mi mujer, y vuelvo al trabajo renovado. Te sugiero que hagas lo mismo.
Una hora después, el empleado vuelve al trabajo sonriente. Al jefe que lo ve le pregunta:
- ¿Qué? ¿Te ha parecido bueno mi consejo?
- Ya lo creo, ahora estoy mucho más relajado. Por cierto, tiene usted una casa preciosa.

Un hombre fue citado para una investigación fiscal del Ministerio de Hacienda.

Asustado, preguntó a su contador de qué manera vestir.
- ¡Usá harapos!, "que piensen que sos mendigo" - replicó el contable.
Cuando preguntó a su abogado, éste le dio exactamente el consejo contrario:
- ¡No dejes que te intimiden! ¡Usá tu traje y corbata más elegante!
Confundido, el hombre se va a la Iglesia con el sacerdote, y le cuenta los dos consejos opuestos y le pide su opinión. Y le dice el Sacerdote:
- Déjame contarte una historia: Una mujer, a punto de casarse, le preguntó a su madre que ponerse en su noche de bodas. "Ponte una bata pesada, de franela, que te llegue al cuello" le dijo la madre. Cuando preguntó a su mejor amiga, esta le dio el consejo opuesto:
"Ponte el negligé más pequeño y transparente que puedas encontrar y con un escote que te llegue hasta el ombligo".
- ¿Pero Padre, que tiene que ver eso con mis impuestos?
El sacerdote le contesta:
- No importa como vistas hijo mío, hagas lo que hagas y te vistas como te vistas... Te van a coger!

El colmo de la pereza
En un pueblo, en el que abundaba el trabajo y la comida, un perezoso estaba a punto de morir de hambre.
Se reunieron el alcalde, el párroco, el consejo municipal y el defensor del pueblo, y por unanimidad acordaron enterrar vivo al perezoso; porque para el pueblo sería un desprestigio que alguien muriera de hambre.
Cogieron cuatro orillos, armaron un cajón, metieron al moribundo, y salieron con él rumbo al cementerio.
Una señora preguntó: “¿Quién murió?”. “Nadie” –le respondieron; “¿y entonces a quien llevan ahí?” –insistió. “Al perezoso que lo vamos a enterrar vivo antes de que muera de hambre” –le explicaron. “No, no, no hagan eso –exclamó la señora–, yo con mucho gusto regalo un bulto de panela”, Otra señora regaló 100 gallinas; un señor, puso una carga de arroz, más un bulto de papas; un hacendado donó un barril de leche, 50 arrobas de queso, una carga de plátanos y otra de yucas. Todos, todos, todos los paisanos donaban, donaban y donaban comida por montones. Cuando iban llegando al cementerio desistieron del entierro porque el moribundo ya tenía comida suficiente para 100 años.
El perezoso sacó la cabeza, y preguntó: “¿Quién va’cocinar todu’eso?”. “Pues, usted” –le contestaron. Y el hombre exclamó: “Entonces… ¡que siga el entierro!”.

Un costeño confía a otro.
- No sé si casarme con una viuda rica a la que no amo o bien con una joven humilde de la que estoy perdidamente enamorado.
- Lo que manda es el corazón -responde el amigo -. Cásate con la joven humilde.
- Es verdad, debo escuchar la llamada del corazón. Seguiré tu consejo.
- Así proceden los hombres que razonan. Y a propósito, ¡dáme la dirección de la viuda!.

Un conductor de una compañía de trasportes llama al gerente, muy temprano, y con voz quejumbrosa y apagada le informa:
-Señor gerente, creo que hoy no puedo ir a trabajar, he amanecido con una tremenda indisposición; me duele la cabeza, tengo estrés, me tiembla el cuerpo...
El gerente lo interrumpe exclamando:
-De ninguna manera Gonzalez; hoy tenemos muchos compromisos que no podemos aplazar por un simple estrés. Cuando yo amanezco en esa condición de salud, le pido a mi esposa que tengamos s**..., eso me relaja, me cambia el ánimo y me permite cumplir con mis deberes sin problemas. Hazlo y verás como te mejoras...
Tres horas después Gonzalez llega a la compañía mostrando su mejor sonrisa y le dice al gerente:
-¡Doctor, Usted es un sabio! Seguí su consejo, y no imagina como me siento de bien. Además debo felicitarlo; tiene usted una hermosa casa, una cama estupenda, y su esposa además de linda es una estupenda e insaciable amante...!

No preguntes

Un padre dando consejos a su hijo que se va a estudiar fuera:
- Y ya sabes Aitor, que cuando estés por ahí tienes que tener buena educación y no preguntar a nadie de dónde es.
- Aiba la ostia, y ¿por qué no tengo que preguntar a nadie de dónde es?
- Pues porque si es de Bilbao, ya te lo dirá él; y si no lo es, ¡no le tienes que hacerle pasar vergüenza!

Estaba una vez un par de amigos platicando, uno de ellos le comentaba al otro:
Sabes, me he sentido muy deprimido, he pensado incluso en el suicidio.
Pero, cómo, si estás en la plenitud de tu vida.
No lo sé, es que no tengo con quien platicar y me siento bastante solo.
Lo que necesitas es eso precisamente, compañía.
El amigo que daba el consejo era dueño de una tienda de mascotas y le dice:
¿Por qué no te llevas uno de mis loros, son muy parlanchines y en unos días no te sentirás sin compañía?
Me parece bien.
Nada más que lo vas a tener que tomarlo tú mismo porque yo tengo que irme.
Pero yo no sé nada de aves.
No creo que te confundas, no tengo tantos pájaros, adiós.
Bueno, adiós.
El deprimido entró entonces y tomó el primer ave que vio sin saber que lo que llevaba no era un perico sino un loro. Días después se volvieron a encontrar ambos amigos:
¡Hola! ¿Cómo estás? ¿Cómo te ha ido con el perico?
Pues bastante bien.
¿Ya te ha empezado a hablar?
Pues hablar, hablar, lo que se dice hablar, no, pero vieras que atención me pone el condenado.

El jefe llega y ve a Chin Hou (chino), y le dice:
- ¡A usted se le ve muy cansado!
- Sí, es que he estado trabajando mucho.
- Mire, cuando estoy así, me tomo el día libre, voy a mi casa, esa casa que está bien arreglada , ¡con un ambiente! y cojo a mi esposa, que es como una modelo , hacemos el amor en mi cama que es tan comoda, eso es lo que me recupera cuando estoy así, como usted esta. ¡Valla y tómese el día, y siga mi consejo!
Al otro día llega Hou al trabajo y el jefe le dice:
- ¿Siguió mi consejo?
- huy si, muy linda su casa, muy cómoda su cama, muy buena su esposa.

Bilbaínos

Va uno de Bilbao conduciendo su recién estrenado coche, por la autovía, dirección San Sebastián, cuando en una de las curvas, se sale de la carretera y se pega “la gran hostia”, quedando el flamante coche completamente abollado.
El bilbaíno sale del coche, y empieza a mirar el mal estado en que ha quedado su flamante coche y en éstas pasa un donostiarra, y viendo lo mal que estaba el de Bilbao, detiene su coche, y le dice :
- No te preocupes, hombre, si quieres dejar el coche, tal y como estaba antes, no tienes mas que soplar por el tubo de escape, y a medida que se vaya hinchando, irán desapareciendo las abolladuras.Dicho esto el donostiarra vuelve a montarse en el coche y deja al bilbaíno manos a la obra.
El bilbaíno todo agradecido, se tumba en el suelo, y empieza a soplar por el tubo de escape, como le había dicho el donostiarra y en éstas que pasa otro de Bilbao, que al ver a su paisano tumbado en el suelo, decide detenerse para echarle una mano.
El bilbaíno accidentado cuenta a su paisano lo que le ha sucedido, y el brillante consejo que le había dado el donostiarra.
El último bilbaíno en llegar, mira atónito al bilbaíno accidentado, y le dice:
- ¡¡TU ERES TONTO O QUE!!... como piensas que se va a hinchar el coche soplando por el tubo de escape…………. SI TIENES LAS VENTANILLAS BAJADAS.

Un hombre, fue llamado a una auditoría por impuestos, le preguntó a su contador que ponerse de vestimenta, y este le contestó:
- Usa cualquier harapo. Que piensen que tú estás en la miseria.
Luego le pidió a su abogado la misma pregunta, pero tiene el consejo contrario. -No dejes que te intimiden. Lleva tu traje más elegante y corbata.
Confundido, el hombre fue a su amigo, le dijo que de los consejos contradictorios, y pidió una resolución del dilema.
- Déjame que te cuente una historia, respondió el amigo.
"Una mujer, a punto de casarse, le preguntó a su madre qué ponerse en su noche de bodas. -Usa un pesado, largo camisón, de franela hasta el cuello.
Pero cuando se lo preguntó a su mejor amiga, ella consiguió consejos contradictorios. -Ponte el negligé más sexy, con un escote en V hasta en el ombligo.
El hombre protestó:
- ¿Qué significa todo esto que ver con mi problema con los impuestos?
El amigo respondió:
- No importa lo que te pones, igual te van a "&%$&%"

Buenos consejos

Un niño, llega al colegio, y le pregunta la profesora:
- ¿Por que no vino tu hermana a clase contigo?
- Fue a la casa de putas.
- ¡¿Qué?! ¿Qué fue a hacer tu hermana a un sitio cómo ese?
- A llevarle unas bragas a mi madre.
- ¿Tu madre es...?
- p**..., de las que joden.
- ¿Y tu padre?
- m**..., de los que dan..
- Jesús, Jesús, Jesús.¿Qué consejos te pueden dar unos padres cómo esos?
- Los mejores, señu. Estamos en España.
- ¿Y qué consejos son esos?
- Joder antes de que te jodan y dar por c**... antes de que te den.

Kung Chang llamó a su Jefe y le dijo:
- Jefe, hoy yo no tlabajal, yo estal enfelmo.

Duele cabeza, duele panza, duele pielna, no voy tlabajo.
El Jefe le responde:
- Kung Chang, realmente hoy te necesito en el trabajo. Cuando me siento así de mal le pido a mi esposa que tengamos s**.... Eso me hace sentir mucho mejor y puedo ir a trabajar. Deberías probar, te hará muy bien.
Dos horas después Kung Chang vuelve a llamar a su Jefe y le dice:
- Jefe, no sabel qué decil. ¿Glacias pol consejo! Ya sentilme mucho mejol, enseguida yo il tlabajo. Felicito mucho, muy linda su casa.

Llega un tipo con el amigo:
Oye, fíjate que tengo unas amigas que quieren divertirse un rato este fin de semana, y necesito que me prestes tu departamento para impresionarlas.
Okay, no hay problema, mira te dejo las llaves, total este fin de semana me voy a ver a mis padres, ¿Y cuántas son?
No compa, son 3, a ver como le hago.
Mira, tengo unas pastillas que me recomendaron para estos casos, pero con cuidado solo agarras la mitad de una.
Y llega el fin de semana y está esperando a las chavas, recuerda el consejo de su amigo y ve el frasco de las pastillas y se queda:
Pero son tres amigas, mejor me tomo 1 completa, bueno otra.
Ya el lunes el dueño del departamento llega, abre la puerta y ve el sofá destrozado, la mesa de cristal hecha pedacitos, los floreros tirados, la alfombra desgarrada. Pasa al cuarto y ve sabanas rotas, ropa en trozos, la cama con los resortes fuera, y en un rincón ve a su amigo todo tembloroso, y le pregunta:
¿Qué pasó?
¡No llegaron!

uno ke lo yaman pa la mili y kiere escakearse y le pregunta a uno ke lo consiguio: como t libraste? y le dice el otro: me faltaban to los dientes y me echaron. entonces este se pego un ladriyazo en la boca y fue pa la mili. se encontro con el kele abia dao el consejo y le pregunto k si le abia funcionao
y le dijo: man echao porke tengo los pies planos.

Todos los días, muy temprano llegaba a su empresa la hormiga productiva y feliz.

Allí pasaba sus días, trabajando y tarareando una antigua canción de amor. Ella era productiva y feliz, pero ¡ay!, no era supervisada.
El abejorro gerente general consideró que ello no era posible, así que se creó el puesto de supervisor, para el cual contrataron a un escarabajo con mucha experiencia. La primera preocupación del escarabajo supervisor fue organizar la hora de llegada y de salida y también preparó hermosos informes.
Pronto fue necesario contar con una secretaria para que ayudara a preparar los informes, así que contrataron una arañita que organizó los archivos y se encargó del teléfono. Mientras tanto la hormiga productiva feliz trabajaba y trabajaba.
El abejorro gerente estaba encantado con los informes del escarabajo supervisor, así que pidió cuadros comparativos y gráficos, indicadores de gestión y análisis de tendencias.
Entonces fue necesario contratar una abeja ayudante para el supervisor y fue indispensable un nuevo computador con impresora a color. Pronto la hormiga productiva y feliz dejó de tararear sus melodías y comenzó a quejarse de todo el papeleo que había que hacer ahora. El abejorro gerente, entonces, consideró que era momento de adoptar medidas.
Así crearon el cargo de Gerente del Área donde trabajaba la hormiga productiva y feliz. El cargo fue para una libélula que alfombró su oficina e hizo adquirir un sillón especial . El nuevo gerente necesitó, claro está, un nuevo computador y, cuando se tiene más de un computador, hay que tener una red local.
El nuevo gerente pronto necesitó un asistente (que había sido su ayudante en la empresa anterior), para que le ayudara a preparar el plan estratégico y el presupuesto para el área donde trabajaba la hormiga productiva y feliz.

La hormiga ya no tarareaba sus viejas melodías y cada vez se le notaba más irascible. "Vamos a tener que contratar un estudio de clima laboral un día de estos" dijo la libélula. Pero un día el gerente general, al revisar las cifras, se dio cuenta que la unidad de negocios (donde trabajaba la hormiga productiva y feliz) ya no era tan rentable como antes.
Así que contrató al búho, prestigioso consultor, para que hiciera un diagnóstico. El búho estuvo tres meses en la empresa y pronto emitió un sesudo informe:
"Hay demasiada gente en este departamento ..." Así el gerente general siguió el consejo del consultor y ... despidió a la hormiga productiva y feliz.
Moraleja: Si eres hormiga productiva y feliz, instala tu propia empresa.

En un pueblito del sur de Alemania hubo una reunión del consejo municipal.

Entre otros asuntos importantes se trataba de la adquisición de un bus escolar y una carreta para el cementerio para poder llevar los baúles a las tumbas. Por esta razón el consejo invitó también al sepulturero. Según el orden del día, primero se dialogó bastante sobre el bus escolar y su importancia de adquisición. El sepulturero siguió muy atento los diferentes aspectos sobre el asunto, pero como se hizo todo muy largo no podía vencer el sueño y cabeceaba frecuentemente. En la reunión pasaron al segundo punto el de la carreta para llevar los ataúdes. El concejal que estaba sentado al lado del sepulturero dio un empujón al durmiente y le preguntó por su opinión sobre el asunto. El sepulturero contestó pensando todavía en el bus escolar:
Caramba, ¿Y no pueden caminar como antes?

El nuevo sacerdote de una parroquia estaba demasiado nervioso en su primer sermón que casi no pudo hablar. Antes de iniciar la segunda homilía, le preguntó al monseñor cómo podría hacerle para relajarse y éste le sugirió que la próxima vez que subiera al púlpito pusiera un poco de vodka en el agua y que después de unos sorbos se sentiría más relajado.
Al siguiente domingo, puso el consejo en práctica y sintió que podía hablar incluso en medio de una tormenta; se sentía de maravilla. Después de regresar a la rectoría de la parroquia encontró una nota del monseñor:
Querido padre:
1. La próxima vez, tome sorbos en lugar de tragar.
2. Son 10 los mandamientos, no 12.
3. Fueron 12 los discípulos, no 10.
4. No nos referimos a la Cruz como "aquella T grandota".
5. No nos referimos a nuestro Salvador Jesucristo y sus apóstoles como "JC y su banda".
6. David derrotó a Goliat, nunca le pateó el fondillo.
7. No nos referimos a Judas como el culero.
8. El Papa es sagrado, no castrado, y no nos referimos a él como "El Padrino".
9. El Padre, el Hijo y el Espíritu Santo no son Papi, el Junior y el Aparecido.
Atte. Monseñor

NI p**......
Un Sr. de 50 años sufrió un terrible accidente que le provocó,
entre otras cosas, la pérdida de su ****.
Cuándo visitó al urólogo, desanimado y errático,
fue rápidamente reconfortado:
"Tranquilo, ahora la ciencia combinada con la técnica,
pueden solucionar cualquier problema".
Le entregó un muestrario en el que había:
Un **** pequeño a $15,000.00;
Uno mediano a $35,000.00 y
Uno grande a $60,000.00.
El hombre desechó el pequeño y dudaba entre el mediano y el grande.
Mientras pensaba, el facultativo le dijo que sería conveniente que lo consultara con su esposa.
Le pareció un buen consejo y llamó a su esposa para explicarle las opciones.
El médico, al regresar al consultorio, encontró al hombre mirando hacia el vacío con una mirada triste.
"Y bien amigo, ¿que le dijo su esposa?"
"Dice que, como casi no lo usamos... prefiere remodelar la cocina"

Están en la oficina dos secretarias una normal y una que estaba muy buena y sexy.


La sexy llega muy enferma de la garganta y le dice a la otra:
- Fijate que me duele mucho la garganta, ya no la aguanto, yo creo que me voy a regresar a mi casa a descansar.
Le dice la secretaria normal:
- Te ves muy mal, te voy a dar un consejo: Cuando yo estoy enferma de la garganta le hago un oral a mi marido y me siento mucho mejor, deberías hacerlo.
La secretaria sexy:
- Que buena idea, lo voy a hacer.
Al día siguiente llega la secretaria sexy muy sonriente y sin dolor de garganta.
Le dice la secretaria normal:
- Oye, te vez muy bien, ¿seguiste mi consejo?
La sexy:
- Si! tu marido no podía creer que fuera idea tuya.

Acude un hombre a la consulta del médico y le dice:
Doctor, no sé qué me pasa, me encuentro muy mal.
El doctor le observa y le diagnostica diciendo:
Tome usted estas pastillas siguiendo a rajatabla las indicaciones del bote y vuelva dentro de una semana a ver si usted ha mejorado.
A la semana se presenta el buen hombre:
Doctor, que sigo teniendo los mismos dolores.
El doctor le pregunta:
¿Ha seguido usted mis consejos?
Y responde el paciente:
Usted dijo que siguiera a rajatabla las indicaciones del bote y en él estaba escrito:
"Manténgase el frasco bien cerrado".

Un hombre fue citado para una investigación fiscal de Hacienda.


Asustado, le preguntó a su contable de qué manera vestirse.
- Usa harapos, para que piensen que estás en la ruina, replicó el contable.
Cuando le preguntó a su abogado, éste le dijo exactamente lo contrario:
- No dejes que te intimiden, usa tu mejor traje y corbata más elegante.
Una buena presencia da credibilidad y ayudará a entablar una relación más amistosa con el inspector.
Confundido, el hombre decide preguntar a su mujer, le cuenta de los dos consejos opuestos y le pide su opinión.
- Déjame contarte una historia -dice la señora
- Cuando estaba a punto de casarme contigo, le pregunté a mi madre qué ponerme la noche de bodas y me dijo:
- Ponte una bata pesada, de franela, que te llegue al cuello, ello hará que te respete.
Pero cuando le pregunté a mí mejor amiga, me dio otro consejo opuesto:
- Ponte el negligé más pequeño que tengas, transparente y con un escote que te llegue hasta el ombligo, eso hará que te desee y afianzará vuestro amor.
El hombre protestó:
- Pero mi amor, ¿qué tiene que ver eso con mis impuestos?
- Pues que no importa como te vistas, te van a f**... igual.

Estos son dos amigos que están en la playa y le dice uno al otro:
- Acho tío, a ver si me dices como se liga más en la playa,no?
...Y le dice el otro:
- Mira tronco, eso.. te pones un tanga... y coges una patata... te la colocas ahí... y las tías se fijarán más en ti.. y ¡¡triunfarás colega!!
-Ah!.. vale... ok.. mañana lo hago.
En esto que llega el día siguiente y el que dió el consejo ve venir al otro,se le queda mirando y le dice:
- Esto.... a ver... ehh... verás.... estooo.... si... si... que la patata.... es delante... no detrás.. xD

Los chistes son una forma popular de entretenimiento que típicamente consta de una anécdota o historia cómica con un final sorpresivo y gracioso. Existen muchos géneros de chistes, como los chistes de niños, los chistes de adultos, entre otros. El propósito principal de los chistes es provocar risa, normalmente atravesando conceptos o situaciones comunes en la vida de una manera humorística y a menudo irónica. La habilidad de contar chistes y hacer reír a las personas es una gran forma de romper el hielo y de conectar con los demás.

chistes de consejo

Contar chistes de consejo es una parte importantísima de cualquier conversación o reunión social. Los chistes, llenos de humor y diversión, tienen la capacidad de liberar tensiones y crear un ambiente relajado y alegre. Pueden contarse en cualquier situación, siempre y cuando sea apropiado y no ofenda a nadie. Contar chistes puede ser especialmente efectivo para romper el hielo al inicio de un evento social, hacer reír a los demás en medio de una conversación o simplemente alegrar el día de alguien que puede necesitarlo. Sin embargo, es esencial recordar que el sentido del humor puede variar de una persona a otra, y lo que para uno puede ser gracioso, para otro puede no serlo.