A continuación se muestra nuestra colección de anécdotas divertidas y chistes sobre Jornada. Hay algunos chistes de jornada cortos que nadie conoce (para contarle a tus amigos) y para hacerte reír a carcajadas.
Tómese su tiempo para leer esos juegos de palabras y acertijos en los que hace una pregunta con respuestas, o donde la configuración es el remate. Esperamos que encuentres estos juegos de palabras con jornada lo suficientemente divertidos como para contarlos y hacer reír a la gente.
Un día, un murcielaguito después de una larga jornada de vuelo se posó a descansar en una rama sin darse cuenta que había otro vampirito al lado, gira para verlo y le pregunta:
- ¿Y vos quien sos?
- ¿Yo? yo soy Vampi.
- ¿Vampi qué?
- Vampi-rito... y vos ¿quién sos?
- ¿Yo? Yo soy Oto.
- ¿Oto qué?
- Oto vampirito.
Uno de ellos va todo deshecho, cansado, agotado, el otro, impecable, lleno de buen humor, sonriente y relajado.
Oye, no me lo creo de verte así, ¿Cómo haces para estar en esta forma luego de 14 horas de consulta con los pacientes?
Y le contesta el otro asombrado:
¡No me digas que tú los escuchas!
Mami, ¿por qué tenemos estas patotas?
Ay, mi bebé, pues muy sencillo, son para no hundirnos en la arena del desierto.
¡Ah!, oye, ¿y por qué tenemos estas pestañotas?
Ay, chiquito mío, pues para proteger nuestros ojos del fuerte sol y de la arena del desierto.
¡Ah!, mami, mami, ¿por qué tenemos esta jorobota?
Oh, queridito, pues en la joroba acumulamos grasa y líquidos para soportar muchos días en el desierto sin agua ni comida, así podemos tener grandes jornadas de trabajo, para eso nos sirve.
¡Ah!, oye, mami, ¿y entonces, qué diablos hacemos tú y yo en un zoológico?
En un restaurante uno de los comensales de una mesa, repara que el camarero, lleva una cucharilla de las de café en el bolsillo de la chaqueta.
Se fija un poco mas y comprueba que todos los camareros llevan cucharillas en los bolsillos de sus respectivas chaquetas.
Intrigado, le pregunta al camarero:
- Lo de la cucharilla en el bolsillo ¿es por algo?
- Si señor, es que ha habido una consultoría para ahorrar costes. En ella se ha comprobado que la cucharilla de café es la pieza que más veces se suele caer al suelo, nosotros la reponemos inmediatamente y en el siguiente viaje a la cocina volvemos a colocarnos otra. De esta forma ahorramos un 3 por ciento de nuestro tiempo.
- Muy inteligente, sí señor.
Al rato, el mismo comensal, observa que le cuelga un hilito hábilmente disimulado de la bragueta. Igualmente comprueba que todos los camareros están en la misma situación.
Vuelve a preguntar al camarero:
- Lo del hilito en la bragueta ¿seguro que también tiene una explicación?
- Efectivamente. En la misma auditoría se ha comprobado que por la cantidad de horas que nos pasamos en el restaurante, tenemos necesidad de ir varias veces al servicio. Con la cuerdecita nos la
sacamos sin tocarla, con lo cual evitamos perder tiempo
lavándonos las manos lo que produce un ahorro del 4 por ciento en el total de la jornada.
Se queda el comensal pensando y dice:
- Bueno para sacarla, muy bien, pero ¿cómo se la guardan?
- Los demás no lo sé, yo uso la cucharilla.
los INCAS, los MAYAS y los AZTECAS.
Los INCAS son aquellos que entran a las 8 de la mañana y salen a las cinco. Todo el tiempo de su jornada, nomalmente, se lo pasan INCÁ-ndotela.
Los MAYAS son aquellos que cada día llegan al trabajo una hora más tarde, luego se marchan a desayunar, vuelven 5 horas más tarde, y dicen: "¿MAYA-mado alguien?".
Los AZTECAS son aquellos que llegan al trabajo, marcan tarjeta y se marchan con la intención de no volver hasta el siguiente día hábil, pero antes de irse le dicen al güevón de turno: "AZTECA-rgo de todo lo mío".
Basta pensar que hay chistes basados en la verdad que pueden derribar gobiernos, o chistes que hacen reír a las chicas. Muchos de los jornada los chistes y los juegos de palabras son chistes que se supone que son divertidos, pero algunos pueden ser ofensivos. Cuando los chistes van demasiado lejos, son crueles o racistas, tratamos de silenciarlos y será genial si nos das tu opinión cada vez que un chiste se vuelve intimidante e inapropiado.
Sugerimos usar solo jornada bromas para adultos y blagues para amigos. Algunos de los chistes obscenos y obscenos son divertidos, pero utilícelos con precaución en la vida real. Intenta recordar chistes divertidos que nunca hayas escuchado para contarles a tus amigos y te harán reír.