Chistes de Amparo

Estos son los 4 chistes de amparo y más graciosos bromas sobre amparo que matan de risa. Lea chistes acerca amparo que sean buenos chistes para niños y amigos en español.


Chistes de amparo para niños y niñas cortos y graciosos

¿Cuál es un buen chiste sobre amparo para hacer reír a la gente? Mira esta lista de historias divertidas que seguramente harán sonreír a todos.

  1. "Oye, se murió Amparo."
    "Vaya, lo siento mucho. ¿Y cómo está su marido?"

    "Desamparado..."
  2. Dos amigas marujas se encuentran en la calle:
    - Oye María, se murió Amparo.

    - ¡No puede ser! ¿Y cómo está su marido?
    - Desamparado. :)
  3. Visita al otorrino Un hombre va al otorrino y le dice:
    - Mire es que mi mujer se está quedando sorda.
    - Ya bueno, y ¿dónde está su mujer?
    - No, es que es muy orgullosa y no va a querer venir, pero yo necesito que me dé una solución porque ya no puedo más con ella. Yo la quiero mucho pero esta falta de comunicación me está matando.
    - Bueno vale, pues vamos a hacer una cosa. Usted hablele a ella desde una distancia prudencial, y vaya acercándose hasta que ella le conteste. Luego me mide la distancia, me lo dice y ya veo yo el grado de sordera que tiene y ya la puedo ayudar.
    Allá que se va el hombre para casa, y nada más entrar grita:
    - ¡Amparo!
    Nada. Se acerca hasta el recibidor y vuelve a gritar:
    - ¡Amparo!
    Nada. Entonces ya entra hasta el salón y vuelve a gritar:
    - ¡Amparo!
    Y nada. Ya desesperado, que piensa que su mujer está sorda como una tapia, se acerca hasta la cocina y allí la ve fregando. Se pone detrás de ella y vuelve a gritarle:
    - ¡Amparo!
    - ¡¡¡¿¿¿Qué quieres coñoooo, que ya te lo pregunté cuatro veces???!!!
  4. Ampaaaaro Un tío que va al otorrinolaringólogo, mire doctor vengo porque tengo un problema.
    - ¿Que le ocurre?
    - Que mi esposa está mal de la escucha, no oye muy bien.
    - Y ¿donde está su esposa?
    - Aquí esta el problema doctor, que no quiere venir, que dice que son manías mías, que yo estoy loco, que ella está bien.
    - Pero si no me trae a su esposa ¿cómo quiere que le haga un diagnóstico?
    - Doctor, piense algo, porque estamos a punto de separarnos y yo la quiero mucho y no desearía perderla.
    - Mire..., no sé,... lo único que se me ocurre es que cuando usted llegue a casa la llama por su nombre y la va llamando mientras se acerca hasta que ella le oiga y cuando ella le conteste, mide la distancia que hay entre usted y ella y así podré saber el grado de sordera que
    padece.
    - ¡Gracias doctor ha salvado usted un matrimonio!
    El tío llega a casa y nada más abrir la puerta grita:
    AMPARO...
    silencio.
    Pasa al recibidor y vuelve a gritar: AMPARO.... nada.
    Desde el pasillo de nuevo: AMPARO... nada.
    Entra en el salón e insiste: AMPARO... silencio total.
    Por fin entra en la cocina, la mujer estaba preparando un guiso y se coloca a la espalda de ella, a un palmo del cogote y la grita:
    AMPARO
    Y ella:
    - ¡Que c**... quieres, te he contestado ya cuatro veces, hombre!