Chistes de Buque

Estos son los 4 chistes de buque y más graciosos bromas sobre buque que matan de risa. Lea chistes acerca buque que sean buenos chistes para niños y amigos en español.


Chistes de buque para niños y niñas cortos y graciosos

¿Cuál es un buen chiste sobre buque para hacer reír a la gente? Mira esta lista de historias divertidas que seguramente harán sonreír a todos.

  1. El buque se hunde sin la menor esperanza de salvación. Unos gritan y otros rezan. Y allí había un catalán que mirando al cielo murmura:
    - ¡Yo que había pagado ida y vuelta...!
  2. EL CHINITO PLAYBOY
    A un programa de televisión asiste un chino que ha
    ingresado a los Guinness Récords debido a que ha hecho el
    amor al menos con una mujer de cada país del mundo, debido
    a su actividad de trabajar en un buque Pesquero. El
    conductor del programa toma un mapamundi y al azar va
    escogiendo países y preguntándole sobre cómo es en el s**...
    cada mujer del Mundo.
    Entonces, el locutor lo interroga:
    -Dígame, entonces, ¿Cómo es la mujer francesa?
    -Bueno, la flancesa es muy tielna y hace el amol una y otla
    vez sin cansalse...
    -la egipcia?
    A la egipcia le gusta hacel el amol en conjunto. Estuve yo
    con tles o cuatlo al mismo tiempo...
    -La argentina........
    -La algentina es la más fogosa. Estuve con una algentina
    dulante más de 12 holas, dándole y dándole.... y nunca se
    cansaba...
    -¿Y la alemana?
    La alemana a pesal de sel flia, es una mujel muy libelal y
    por lo Tanto le gusta en cualquiel palte.
    -¿Y la brasilera?
    -Mujel caliente, a cualquiel hola quiele cojel y tiene el
    mejol movimiento de cadelas.
    -Y la belga?
    -La belga...?, la belga la tengo destlozada,
    hecha mielda.... ya no silve pala nada !!!
  3. Un hombre lleva ya dos semanas de viaje en un buque en el que no hay mujeres. Un día pregunta al capitán cómo hacen los marinos un viaje tan largo sin relaciones sexuales.
    - Nosotros nos arreglamos perfectamente con Ching Fu, el cocinero chino. Si quiere usted también...
    - ¡No, de ninguna manera!
    Pasa otra semana y el hombre no aguanta más. Decide hablar nuevamente con el capitán.
    - Mire, capitán. Ya no soporto más la abstinencia. Tráigame al chino, pero con la condición de que solo usted lo sepa...
    - ¿Cómo? ¿Y los cuatro hombres que tienen que agarrar al chino?
  4. Queriendo potenciar el turismo, el alcalde de Lepe decide hacer algo para llamar la atención del mundo.
    Llama a los funcionarios del Ayuntamiento y al jefe de la policía local y les ordena enviar un telegrama a Pekín declarando la guerra.
    Se recibe el telegrama, y el presidente de China pregunta a sus generales:
    Lepe nos declara la guerra...., ¿dónde está Lepe....
    Después de 4 horas localizando al belicoso país, encuentran que Lepe es un pequeño pueblo, semejante a la cagada de una mosca en el mapamundi, ubicada al Sur de España.
    Analizando el riesgo de semejante conflicto bélico, las autoridades militares chinas deciden aceptar la guerra.
    El presidente llama a su secretaria y le ordena:
    - Contéstele al gobierno local de Lepe y dígale que aceptamos guerra, y que además, nos digan con que potencial militar cuentan.
    Se recibe el telegrama en Lepe. Después de leerlo, el alcalde le dice a un funcionario del Ayuntamiento:
    - Vamos a contestarle a esa gente: Contamos con 20 policías locales, 15 bomberos, 130 pistolas, diez escopetas de caza, 5 coches de policía, tres gabarras y dos lanchas neumáticas con motor fuera borda; además, la Defensa Civil la componemos: el alcalde, 10 funcionarios y los jubilados de los hogares del pensionista; envíeselo y que nos digan ellos con que cuentan para hacernos frente.
    Respuesta de China:
    - Contamos con 27 millones de soldados, 120 mil oficiales, 24 generales y 6 Almirantes, 200 mil cañones, 25 mil tanques, 36 mil aviones, 150 submarinos, 30 portaaviones, 18 buques cisternas todo dirigido por satélite.
    Se recibe el telegrama en Lepe.
    Respuesta del Alcalde:
    - Lepe no acepta la guerra por no tener sitio para tantos prisioneros.